Admito que la cosa está que echa humo. Y no seríé yo el que eche más leña al fuego, así que voy a escribir hoy sobre la bolsa.
La bolsa…; la bolsa va bien. La bolsa sube, al contrario que nuestra economía. Todavía recuerdo hace un año cuando lo que teníamos, según el gobierno, era un ajuste del sector inmobiliario y de la construcción que debía ser rápido y profundo. De ahí pasamos a una crisis financiera de las de aupa y de la crisis financiera, donde el entonces Ministro de Economía defendía que no veía indicios para entrar en una recesión, entramos en caída libre sumergiíéndonos en una recesión económica de la que, en palabras del Sr. Almunia, Comisario Europeo para Asuntos Económicos y Monetarios, tardaremos más en salir que el resto de Europa. Hoy nuestro Presidente dice que hay que reactivar el sector inmobiliario para empezar a salir de la crisis.
El Gobierno, presto a buscar soluciones, creó un fondo que, bajo el subterfugio de dar liquidez a familias y empresas, lo que hizo, en realidad, es aportar TREINTA MIL MILLONES DE EUROS del erario público a los bancos y cajas. Ese dinero no llegó a su destino, o por lo menos no se ha notado. Como quiera que esta medida podía ser impopular, y por aquello de la ley de la compensación (sería por esto), el gobierno adoptó otra medida que iba a ayudar de forma sensible, a la economía española, y de paso, al medioambiente. Nos iba a aportar a cada hogar español una bombilla de bajo consumo. Yo tampoco ví nunca esa bombilla.
El paro sigue aumentando y los informes de los expertos no pueden ser más desalentadores. El dialogo social está roto y por ello, el Presidente de la CECA, la Confederación de las Cajas de Ahorro, opina que si no se recompone este dialogo, se debería convocar elecciones anticipadas. Lo dice el que representa a todas las Cajas, entidades financieras controladas por intereses políticos y que han realizado, durante la bonanza económica, operaciones dinerarias que ponen los pelos de punta a más de uno. Pero hay un detallito que no se me pasó por alto, el Sr. Quintás deja el cargo el próximo mes de mayo; hizo bueno, por lo tanto, aquello de “para lo que me queda estar en el convento…â€.
Los sindicatos, ante el aumento del paro y la ruptura del diálogo social, anuncian que están estudiando convocar una huelga general y sus correspondientes manifestaciones. Medidas, que sin duda, redundarán en una mejora sustancial de nuestra situación económica (esto de que al escribir no se note la sorna airada con la que lo hago...).
Y, para postre de tal pastel, los políticos más preocupados por las tácticas mediáticas que por la estrategia verdaderamente política, en su mejor sentido de la palabra, que de forma eficaz sea capaz de poner en común lo mejor de cada uno para sacarnos del agujero.
Está claro, despuíés de todo íésto, por quíé vamos a salir de la recesión los ultimos, ¿no?.
Pero, en fin, yo venía aquí a hablar de la bolsa…; aunque, ahora que lo pienso, de eso sabe vuesa merced más que yo, seguro. Otro día hablamos de la bolsa, pues.
Vale.