La Comisión Europea va a tratar de asegurar que la oferta de Microsoft para dar a los usuarios la ocasión de escoger navegadores rivales funciona adecuadamente con los consumidores y sus rivales.
La compañía estadounidense del software propuso a Bruselas en julio instalar una pantalla de votación que permitiría a los usuarios establecer navegadores rivales en su última versión del sistema operativo Windows, con lo que acabaría con una disputa con la Comisión que se prolonga desde hace una díécada.
La institución, encargada de velar por la competencia en los 27 estados miembros, ha sancionado hasta ahora a Microsoft con un total de 1.680 millones de euros en multas por infringir las normas antimonopolio de la Unión.
Un cuestionario confidencial de la Comisión obtenido por Reuters muestra las dudas sobre si los usuarios entenderán que se les está ofreciendo una elección entre navegadores, y si de hecho llegarán a usar la pantalla de votación.
"En su opinión, ¿es el enfoque propuesto para descargar e instalar navegadores competidores directo y sencillo como sería necesario desde una perspectiva de experiencia de usuario, para que la pantalla de votación se utilice de manera eficaz de modo que se pueda ejercer la opción de consumidor entre navegadores que compiten?" pregunta el cuestionario.
Tambiíén pregunta a los encuestados que comenten el diseño y la aplicación propuestos para la pantalla de votación. El cuestionario tiene fecha de julio, y se establecía una fecha límite de agosto para las respuestas. La Comisión no ha dicho cuándo decidirá sobre la oferta de Microsoft.
En una entrevista publicada el miíércoles en el International Herald Tribune, la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, dijo que quería llegar a un acuerdo con la empresa antes de que termine su mandato este año.
El Internet Explorer de Microsoft compite con los navegadores de Google, Mozilla Foundation y Norwegian Opera, entre otros. Reuters