La sequía que sufre la cuenca del río Yangtsíé ha obligado a posponer la puesta en pleno funcionamiento de la Presa de las Tres Gargantas, el proyecto hidráulico más grande del mundo.
El 15 de septiembre, el embalse en el curso medio del río comenzó a subir sus niveles de agua (entonces 145 metros) y tenía previsto llegar a finales de octubre a su nivel máximo, 175 metros, pero actualmente sólo alcanza los
170, detalló a la agencia Xinhua el director general de la Corporación Tres Gargantas, Li Yongan.
El plan original fue pospuesto debido a la grave sequía que golpea vastas áreas del curso medio y bajo del Yangtsíé, señaló la información.
A pesar de que el caudal en el curso alto tambiíén es menor por la escasez de precipitaciones, la presa ha aumentado su velocidad de descarga de agua a 8.000 metros por segundo con el fin de aliviar la sequía, indicó Li.
El imprevisto sólo retrasará unos días los planes, señaló el responsable de la presa, quien indicó que probablemente a principios de noviembre alcanzará su plena capacidad generadora (hasta ahora sólo funcionaban 26 de sus 32 turbinas).
La obra, comenzada en 1993 (pero ya sugerida por Mao Zedong en los años 50), se construyó para responder a la creciente demanda energíética del delta del Yangtsíé (Shanghái y alrededores), la cabeza del desarrollo económico chino, y tambiíén para intentar reducir las inundaciones y crecidas estacionales del mayor río asiático.
Los opositores de la presa critican los cerca de 1,28 millones de personas que fueron desplazadas para su construcción, además del negativo impacto ambiental y la píérdida de patrimonio arquitectónico chino que ha quedado sumergido bajo las aguas.