El presidente de China, Hu Jintao, aseguró hoy que tanto su país como EEUU deben rechazar el proteccionismo "en todas sus formas", tras reunirse con su colega estadounidense, Barack Obama.
Según dijo el mandatario chino en una comparecencia conjunta despuíés de su reunión, los dos mantuvieron un "diálogo excelente" en el que acordaron continuar su cooperación sobre asuntos macroeconómicos "en un plano de igualdad" para resolver las "fricciones comerciales y financieras".
La economía acaparó buena parte de la conversación de dos horas que mantuvieron ambos mandatarios, inicialmente con un grupo reducido de funcionarios y despuíés con su equipo de asesores en pleno.
Según indicó el presidente estadounidense, ambos mandatarios abordaron el asunto de la cotización de la divisa china, uno de los temas más espinosos en su relación económica.
Obama expresó su satisfacción por el "compromiso de China de hacer la cotización de su divisa más orientada a los mercados gradualmente", algo que consideró que contribuirá a hacer más "equilibrada" la economía mundial.
En su declaración, Obama aseguró que su alianza con China ha contribuido a que su país haya podido salir de la recesión en que se encontraba sumido y declaró que la colaboración entre los dos países permitirá aumentar las exportaciones y los empleos en EEUU, mientras que elevará la calidad de vida en la República Popular.
Obama subrayó su compromiso para reducir el gasto público y ahorrar más.
El díéficit presupuestario estadounidense alcanza ya los 1,42 billones de dólares y China, que es el principal comprador de bonos estadounidenses, y ha expresado su preocupación por la depreciación del dólar.
Los dos países han registrado tambiíén fricciones en el área comercial.
EEUU impuso aranceles a los neumáticos chinos en septiembre y recientemente anunció tambiíén medidas contra las tuberías originarias de ese país.
En este sentido, Hu indicó que "ambos países deben renunciar al proteccionismo en todas sus formas".
El líder chino tambiíén expresó su satisfacción por los "signos positivos" de una recuperación económica global pero advirtió de que "los cimientos de la recuperación aún no están firmemente asentados".