Tal y como estaba previsto, el consejo de Administración de Repsol YPF ha aprobado reducir su dividendo un 19% con respecto al del ejercicio anterior con el objeto de ajustar la retribución a la previsible caída del beneficio durante el ejercicio.
Según ha informado la compañía en un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la distribución de un dividendo bruto de 0,425 euros por acción a cuenta del ejercicio en curso.
El pago de dicha cifra se hará efectivo el próximo 22 de diciembre permitiendo a los accionistas beneficiarse del trato fiscal más favorable que tiene el cobro de dividendos este año frente al próximo.
Así, el Presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha manifestado ante el Consejo de Administración que "este dividendo compatibiliza una retribución adecuada al accionista con el plan de inversiones encaminado al crecimiento de la compañía".
El dividendo a cuenta de 2009 representa el 81% del abonado en 2008, y es acorde con el actual entorno, caracterizado por el descenso de los precios del crudo y de los beneficios en el sector. En los últimos cinco años Repsol ha incrementado su dividendo significativamente.
La decisión del Consejo ha resultado contraria al interíés de su principal accionista, el grupo inmobiliario Sacyr Vallehermoso, que cuenta con el 20,01% del capital y cuyo presidente, Luis del Rivero, había reclamado el mantenimiento del dividendo en los mismos niveles del pasado año, a pesar de que los resultados de Repsol YPF han caído un 55% en los nueve primeros meses del año.
Diferencias
A pesar de las diferencias de puntos de vista, la decisión de recortar el dividendo se adoptó finalmente por unanimidad, apuntaron a Efe fuentes cercanas a la petrolera.
En el comunicado, Repsol YPF consideró que el dividendo es "acorde con el actual entorno, caracterizado por el descenso de los precios del crudo y de los resultados del sector", y recordó el recorte de la retribución llega despuíés de varios años de incrementos significativos, desde los 0,25 euros de 2004 hasta los 0,525 euros del pasado año.
Además, en los últimos años, la compañía ha aprobado, antes de la celebración de la Junta, el pago de un dividendo complementario de igual importe al repartido a cuenta.
Por el momento, el pago del dividendo a cuenta de 0,425 euros supondrá para la compañía un desembolso de 518,9 millones de euros, de los que 103,8 millones irán a parar a manos de Sacyr Vallehermoso, y 73,1 millones serán para La Caixa, segundo máximo accionista de Repsol YPF, con una participación del 14,1 por ciento.
Según fuentes del mercado, Sacyr, que ha visto cómo se han reducido sus ingresos por dividendo a cuenta en 24 millones de euros, habría exigido el mantenimiento de la retribución y para ello habría propuesto que la petrolera recortara las inversiones y vendiera determinados activos por parte de la petrolera.
Un consejo sin Fainíé
Las fuentes consultadas apuntaron que a la reunión del Consejo no asistió Isidre Fainíé, presidente de La Caixa, que se habría acercado a la postura de Brufau.
La política de dividendo de la petrolera hispano-argentina en condiciones "normales", como ha recalcado en varias ocasiones el propio Brufau, establece un "pay out" (parte de los beneficios que se destina a retribuir a los accionistas) del 50%.
No obstante, las condiciones de mercado han variado de manera significativa, debido a la caída del precio del crudo, la bajada de los márgenes de refino y la contracción de la demanda, y Repsol YPF ha sufrido un recorte de sus beneficios hasta septiembre del 55 por ciento, hasta 1.257 millones de euros.
Brufau advirtió recientemente de que la compañía no va a variar por razones "externas" su Plan Estratíégico 2008-2012, que, según recordó, fue aprobado por unanimidad en el Consejo.
