Por... MARTIN CRUTSINGER
El gobierno del presidente Barack Obama, enfrentado a una crisis de embargos de viviendas que no parece terminar, lanzará el lunes un nuevo programa que presionará a las compañías de hipotecas a que hagan un mayor esfuerzo para que la gente pueda quedarse en la casa que está pagando, dijeron el sábado funcionarios nacionales.
"Vamos a tomar medidas adicionales para mejorar la transparencia y rendición de cuentas" de las compañías, dijo la vocera del Tesoro Meg Reilly. La meta será que un mayor número de hipotecas problemáticas sean refinanciadas en príéstamos nuevos con pagos mensuales más bajos, dijo.
Ejecutivos de la industria hipotecaria dijeron que la iniciativa aumentará la presión al señalar a las compañías que no están haciendo esas modificaciones a un ritmo considerado aceptable.
El Tesoro tambiíén anunciaría que desde ahora esperará a que las modificaciones de príéstamos sean definitivas para pagar a las compañías los incentivos que reducen los pagos de los clientes.
En el programa del Tesoro que está vigente, de 75.000 millones de dólares, las compañías aceptan pagos más bajos y reciben del gobierno un pago inicial de 1.000 dólares y hasta otros tres anuales del mismo monto. La meta del gobierno es que menos gente pierda su casa.
El programa recibió fuertes críticas por ser considerado insuficiente ante una oleada de embargos hipotecarios, la que persistirá hasta el año próximo debido al alto desempleo, según los analistas.
Un nivel ríécord de 14% de los propietarios con hipotecas estaban atrasados en sus pagos o camino a un embargo a finales de septiembre, según un informe de la Asociación de Banqueros de Hipotecas.
El Panel de Supervisión del Congreso, que controla el gasto del paquete de auxilio económico del Tesoro, dijo el mes pasado en otro reporte que los embargos ahora amenazan a las familias que sacaron príéstamos convencionales a tasa de interíés fija y que hicieron un pago inicial del 10 al 20% del valor de sus casas, gente que no debería tener problemas en tiempos normales.
Scott Talbot, ejecutivo de la Mesa Redonda de Servicios Financieros, dijo que la crisis de embargos, que había comenzado por la falta de pago de hipotecas de baja calificación, ahora se está extendiendo a los tipos tradicionales de príéstamos debido al desempleo, que acaba de llegar a 10,2%, un nivel ríécord en 26 años.