elmundo.es/María Hernández
Madrid.- Con apenas una díécada en el mercado, Rumbo.com parece resistir con holgura los embites que la crisis ha dado al sector turístico español. Los resultados hasta ahora la acompañan, según su Consejero Delegado, Josíé Rivera. No en vano, a la espera de cerrar 2009, los datos del tercer trimestre apuntan a que el número de clientes que han utilizado sus servicios se ha duplicado. Cada día los usuarios realizan más de un millón de búsquedas a travíés de esta agencia on-line, que ya factura casi el 10% de todos los billetes que se venden en el país. Con presencia en España, Portugal y en varios países de Latinoamíérica, el futuro pasa por consolidar su posición en cada uno de ellos y por seguir innovando.
Pregunta.- En un momento en el que el turismo no pasa por su mejor íépoca en España, ¿cómo se consigue sobrevivir, teniendo en cuenta además que un turista puede encontrar una agencia de viaje casi en cada esquina?
Respuesta.- Nuestra misión es tener un portfolio amplio de productos y ofrecíérselos al cliente al mejor precio y siempre pensando en el antes, el durante y el despuíés. Somos una agencia on-line, lo cual nos hace diferentes en cuanto a canal respecto a las agencias tradicionales.
Sin embargo, creo que desde el punto de vista futuro hay un alto grado de convivencia para los dos modelos de negocio. Hay gente que busca el modelo presencial, por tener una cercanía física con la persona que le está ayudando y hay gente que prefiere Rumbo, porque ve Internet como una vía más sencilla, más conveniente y más cómoda.
P.- ¿Quíé creíéis que os hace diferentes?
R.- Por un lado, la innovación. Nuestra plataforma tiene la tecnología última para encontrar los mejores precios. Nuestros clientes realizan al día más de un millón de búsquedas. Imagínate en un avión con 300 plazas, cada una con su precio, cuatro o cinco aerolíneas en cada ruta con dos o tres frecuencias al día...Si se multiplican todas las posibilidades, te das cuenta de que la algoritmia que hay detrás de todo para facilitar al cliente el mejor precio no es algo trivial. Somos un poco como el Google de los viajes.
Por otro lado, el servicio. A diferencia de otros competidores que tienen una visión más cortoplacista, en Rumbo tenemos una visión a medio-largo plazo y sabemos que al cliente hay que cuidarlo porque es el que te va a dar de comer dentro de muchos años.
P.- ¿Cómo consiguen que sus precios resulten competitivos y atractivos para el cliente?
R.- Tratamos de darle el poder. Somos como una agencia de viaje en la que la pantalla está mirando hacia el consumidor y utilizamos las opiniones y comentarios que los usuarios hacen sobre su experiencia de compra para dar una mejor guía de recomendación a clientes futuros.
En cuanto a optimizar los precios, pensamos que nuestro trabajo aporta valor. Por eso, lo que hacemos es encontrar la mejor combinación de viajes para nuestros clientes dentro de sus necesidades y cobramos un gasto de gestión por nuestro servicio, que puede estar en el entorno de los 10 ó 12 euros.
P.- En el tercer trimestre de 2009 se ha duplicado el número de clientes que utilizó Rumbo para viajar. ¿Se han enterado de la crisis?
R.- No somos ajenos a la coyuntura económica y en ese sentido no somos inmunes, nadie es inmune. Pero tanto nuestro modelo de negocio como nuestras situación competitiva está a muy buen nivel y mejorando.
La crisis ha afectado al sector on-line, que se había acostumbrado a crecer en todos estos años a doble dígito y desde el segundo semestre de 2008 y en el primero de 2009 se ha notado un decrecimiento.
Por nuestra parte, Rumbo ha ganado peso y cuota de mercardo. Creo que esto último tiene mucho que ver con una sensibiliad a usar Internet como medio ideal para poder comparar. Además, el cliente se ha dado cuenta de que no todas las empresas somos iguales. Honestamente, creo que a nosotros estos nos ha beneficiado. Los resultados hasta este momento nos acompañan, a pesar de que la situación es complicada para muchas compañías de este país.
P.- ¿Han percibido algún cambio de hábitos por parte de los usuarios?
R.- Sí, y te hablaría de dos frecuencias. Una más general, por la que Internet ha supuesto un cambio de hábitos para la mayor parte de nuestros clientes, al ser un medio a travíés del que muchos clientes prefieren hacer la gestión de sus viajes.
Y otra más particular. En el último verano, aunque ya ocurrió tambiíén en el anterior, hemos notado que el cliente cada vez planifica más a corto plazo y el último minuto de este año ha sido muy importante. Probablemente ha venido motivado por la incertidumbre y el cliente ha esperado haste el último momento.
Desde el punto de vista de la tipología de los viajes, este año tambiíén se ha reforzado más el viaje a la costa española. Muchos de los clientes han optado por pasar sus vacaciones en España.
P.- ¿Quíé perspectivas tienen para 2010?
R.- Desde el punto de vista de coyuntura y evolución del mercado, por nuestra cabeza no pasa otra cosa que seguir creciendo. Pensamos cerrar este año creciendo en cuanto a volumen de facturación respecto al año pasado.
Desde un punto de vista más estratíégico, nuestros planes pasan por seguir afianzando y ayudando a que Internet y la venta de comercio electrónico por Internet evolucione.
Por otro lado, creo que en momentos como los que estamos pasando las compañías, lo mejor que tenemos son los clientes. La mejor inversión de marketing que puedes hacer en estos momentos es fidelizar al cliente que ya tienes y La experiencia nos ha demostrado que el mejor marketing que puede haber es el boca a boca.
P.- Rumbo ya está presente en Portugal, Venezuela, Colombia, Argetina o Brasil...¿tienen previsto continuar con su expansión internacional?
R.- El último mercado que abrimos fue Portugal, hace un año y medio. Nuestra estrategia en estos momentos pasa por hacernos muy fuertes a nivel local, pero no estamos cerrados a, por un lado, crear un proyecto en otro país y, por otro lado, crear opciones de crecimiento vía adquisición. Si encontramos una oferta interesante, lo haremos. Al año que viene probablemente habrá novedades en este sentido.
P.- A finales de 2008 empezó a funcionar Rumbonegocios, dirigido principalmente a pequeñas y medianas empresas. ¿Quíé valoración hacíéis de este primer año en marcha?
El lanzamiento de Rumbonegocios fue más una necesidad que otra cosa. Veíamos que un nicho de nuestros clientes eran pequeña y mediana empresa y que lo que estaban demandando era una solución que se adaptara a sus necesidades. De esa necesidad vimos la oportunidad para crear este proyecto.
Es curiosos pensar que sin que hubiera una solución específica para ese mercado, muchas de las pequeñas y medianas empresas ya estaban operando por Internet. Nosotros estamos muy ilusionados, hemos tenido un recorrido de proyecto ilusionante, pero estamos esperando a final de año para tener más datos.
P.- ¿Quíé relación tienen con los agentes con los que trabajan? (aerolíneas, hoteles...)
R.- En general tenemos muy buenas relaciones. No puede ser de otra manera cuando, en realidad, lo que hacemos es vender. Lógicamente, como en todas las industrias, hay negociaciones.
Somos una agencia de viajes acreditada oficialmente. Tenemos una manera de trabajar seria, la información que damos es fidedigna y cumplimos la legislación. De hecho, somos la única compañía de comercio electrónico certificada con AENOR en cuanto a seguridad de datos.
P.- Ustedes que chequean a diario tantos precios, ¿existe mucha diferencia entre el precio de un billete de avión con una compañía low-cost y una compañía que no es low-cost?
R.- Yo soy de la opinión de que no existe el concepto bajo coste, de que es una mala definición. Para mí el concepto bueno es el de 'empresa eficaz en la gestión de sus en sus costes' o no, porque en la medida en que una compañía es eficaz en sus costes puede trasladar eso a sus clientes. Yo no hablaría tanto de compañía de bajo coste, porque todas las empresas están orientadas a tener los ingresos altos y los costes bajos, y cambiaría el tíérmino por el de 'compañía de reciente creación', que refleja mucho más la realidad.
Digamos que la diferencia existe en algunos casos sí y en algunos casos no, pero no tenemos nuingún caso de una compañía que sea siempre la más barata en las rutas en las que trabajamos, ninguna, independientemente del marketing que hagan.