La Corte Constitucional ordenó suspender un proyecto de explotación de cobre en el noreste de Colombia, el mayor del país y a cargo de la multinacional Muriel Mining Corporation, por no consultar con las comunidades indígenas y negras sobre el impacto ambiental y cultural que causaría la extracción.
El fallo del máximo tribunal conocido hoy señala que en este caso “no se actuó de manera adecuada para procurar que la comunidad conociera el contenido del proyecto Mandíé Norte y posteriormente, con conocimiento de causa, pudiese decidir con suficiente ilustraciónâ€.
Esa sentencia obliga a suspender las actividades de exploración y explotación que se están adelantando en los municipios de Frontino, Urrao, Vigía del Fuerte, Carmen del Darien y Murindó, entre los departamentos de Antioquia y Chocó.
La Corte consideró que ese proyecto alterará de manera inevitable el equilibrio ecológico y la biodiversidad de la zona, por lo que debe cumplir con el requisito de consultar a las comunidades que habitan en el lugar y que resultarán afectadas con la extracción.
“El Ministerio del Interior y de Justicia debió adelantar el proceso de consulta previa con todos los grupos que van a ser afectados con el proyecto minero, dándole amplias facilidades para que conozcan y participen, lo cual en este asunto no se posibilitóâ€, agregó.
El tribunal tambiíén recordó que la explotación de recursos naturales en territorios tradicionalmente habitados por las comunidades indígenas debe hacerse compatible con la protección que el Estado debe darles para garantizar su integridad social, cultural y económica.
En esa zona, donde Muriel Mining Corporation tiene una concesión por 30 años, habitan 12 comunidades indígenas de la etnia Embera y dos de afrodescendientes.
La multinacional espera explotar en esa zona el mayor yacimiento de cobre descubierto en Colombia, además de oro y molibdeno.