A vueltas con los 11.000 puntos del Ibex
Publicado por Josíé Antonio Fernández Hódar
El principal indicador de la bolsa española ha cerrado la semana con un modesto avance del 0,73%, sin lograr, en ningún momento, llamar a las puertas de los 11.190 puntos, máximo de sesión alcanzado el miíércoles de la semana anterior.
La bolsa española ha sido incapaz de chupar rueda de Wall Street, cuyos principales índices han marcado esta semana nuevos máximos, ni contagiarse de las alegrías alcistas del DAX 30 de Fráncfort, que ha superado los altos de enero, y del CAC 40 de París, que marca nuevo máximo mensual.
No sabemos si queda alguien, en algún lugar del planeta, que confíe ya en la recuperación de la economía española; máxime, cuando esta semana la vicepresidenta Salgado, tras anunciar la batería de medidas que el Gobierno aprobará para sacarnos del hoyo, admitió desconocer su capacidad de influencia en el crecimiento y en la creación de empleo. Y si el propio Gobierno tiene dudas de que sirva para algo lo que hace, hay que cambiar el nombre a la Ley de Economía Sostenible y llamarle Economía Insostenible.
En definitiva, 54 medidas en las que no creen ni quienes las promulgan. Con sólo dos: reforma laboral y reducción drástica, desde ¡ya! del gasto público hubiese sido más que suficiente para comenzar. Luego, habría que ir afilando el lápiz para frenar el deterioro y encauzar el crecimiento.
Mis paisanos andaluces, y supongo que tambiíén los extremeños, pueden hacer palmas con las orejas. Ya no necesitan 35 peonadas para tener derecho a percibir el PER, con sólo veinte, puede estar cobrando de papá Estado todo el año. Esta modificación les permite disponer de más días para hacer trabajos, faenas o chapuzas, que cobran en negro y por las que no tributan. Cuesta dinero, que pagamos usted yo, pero compra voluntades y da votos, que es a la postre lo que se busca.
Se hace cuesta arriba pensar que los inversores no residentes puedan a poner la vista en la bolsa española, máxime, cuando analistas domíésticos de solera están desviando sus carteras hacia EEUUy aconsejando a sus grandes clientes enviar el dinero a trabajar fuera.
La salida al alza de nuestra bolsa no se va a lograr cuando hay más sombras que luces. Al final, tras muchas dudas y bandazos, subirá. Y lo hará porque los dos grandes bancos, Telefónica, Repsol, Iberdrola y casi una docena de valores del Ibex 35 tienen su domicilio social en España, pero el grueso de su facturación y de sus beneficios les viene del exterior y, en casi todos los casos, de los países que serán los primeros en salir de la recesión económica.
El resto del mercado, salvo honrosas excepciones, queda en manos de la especulación a corto que puede provocarle subidas en vertical por nada, o bajadas en picado sin motivos justificados, sin que estos movimientos tengan un especial reflejo en los índices, dada su baja ponderación.
Seguimos siendo alcistas para el Ibex, aunque se tome su tiempo para salir al alza, y apostando por los pesos pesados