Otra que se va de rositas, pena inferior a 2 años así que no irá a prisión, le ha salido rentable, a buscar un nuevo pagafantas...
Condenada por estafar 81.000 euros con falsas promesas de amor - Sucesos - Levante-EMV
La mujer le convenció de que estaba enamorada y de que necesitaba el dinero para su hijo tetraplíéjico
EFE VALENCIA
íngela María R. B. entró en la sala de vistas luciendo un bolso de marca y zapatos de tacón, mostrando un alto nivel adquisitivo. Fue juzgada hace unos meses por la Audiencia de Valencia, que acaba de condenarla a casi dos años de prisión. Su único delito han sido sus artes amatorias, hasta el punto de "conseguir estafar" a un hombre para que le entregara 81.000 euros tras hacerle creer que estaba enamorada de íél. La mujer, de 35 años y natural de Colombia, deberá indemnizarle con 30.000 euros.
Todo comenzó en octubre de 2004, cuando íngela María inició una relación de "amistad" con la víctima, que mantuvieron vía telefónica, ya que ella residía en Barcelona y íél en Valencia. La mujer, que en el juicio reconoció los hechos, fingió que quería mantener una relación sentimental con el perjudicado diciíéndole que le quería y que fuese a verla. Consiguió que creyese que se había enamorado y aceptase mantener la relación yendo a Barcelona los fines de semana.
Una vez que la acusada se ganó su confianza, le hizo creer que estaba separándose de su marido, con quien compartía un hijo, "para, a partir de ahí, inventarse toda una sarta de mentiras" con el fin de que su víctima le entregara 2.000 euros mensuales para el niño.
Un abogado y una silla de ruedas
Le llegó a decir que necesitaba un abogado para separarse (3.000 euros). Le dijo que su hijo había sufrido un accidente y había quedado tetraplíéjico y necesitaba un coche especial, silla de ruedas y acondicionar el domicilio (21.000 euros).
Le convenció tambiíén para que invirtiera en una nueva vivienda para irse a vivir juntos (35.000 euros), "y así hasta lograr que la víctima le entregase hasta 81.000 euros durante el año 2005".
En noviembre de ese año, y ante la insistencia del hombre de conocer al hijo y casarse, íésta le mandó un mensaje de móvil diciendo que deseaba romper la relación. Entonces comprendió que nada de lo dicho por su supuesta novia era verdad, y la denunció.