Para que el muy promovido iPad se vuelva un íéxito entre los consumidores, Apple tendrá que cambiar la mentalidad de gente como Jon Byron.
Byron, banquero de 54 años de Connecticut, salió esta semana de una tienda Apple de la Quinta Avenida con nuevo escáner de tarjetas y serias dudas sobre la tendencia de las tabletas de computación.
“Puedo hacer todo en mi MacBook Pro, celular y BlackBerryâ€, afirma. “No necesito más aparatos. De hecho ya tengo seis números telefónicos y suficientes aparatos que tengo que recargar por las nochesâ€.
No obstante todo el ambiente de circo que rodea la salida del nuevo dispositivo de la compañía Apple, las dudas persistente entre los consumidores.
Muchos no entienden el propósito de este aparato, ¿quiíén quiere pagar 500 dólares por otro aparato además de una computadora y un smarthphone? Despuíés de todo, los telíéfonos celulares tienen creciente rango de funciones, como la misma Apple indica en los comerciales de sus modelos iPhone.
“Los primeros cinco millones se venderán en un abrir y cerrar de ojosâ€, señala Guy Kawasaki, un empresario de Sillicon Valley que fue ejecutivo de Apple en los años 1980. “No obstante, veamos: no puedes hacer llamadas telefónicas con esto, tampoco puedes tomar fotografías y además tienes que pagar por contenidos que hasta ahora no estabas dispuesto a pagar. Eso me parece difícil para miâ€.
Apple y otras compañías tecnológicas que están sacando al mercado una oleada de tabletas de pantalla de tacto afrontan un ambicioso reto. La industria quiere crear un mercado para un nuevo aparato que la mayoría de la gente no necesita realmente, o no sabe aún que lo necesita.
El propósito de las tabletas es permitir que la gente vea vídeos, navegue por internet, juegue videojuegos y lea libros, revistas y periódicos donde quiera que vayan sin el estorboso inconveniente de una laptop completa.
Tecnófilos Quienes ya ordenaron una iPad o se presentaron ayer a comprarla en las tiendas â€son tecnófilosâ€, señala Eitan Muller, profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad Stern. Pero esa gente sólo constituye cerca de 16% del mercado potencial del iPad, dice Muller. â€El grueso del mercado lo forma gente pragmáticaâ€.