La supresión de los blindajes se llevará a cabo en 2011
Publicado en Expansión por C. M.
El Congreso, con los votos a favor del PSOE y CiU y la abstención del PP, aprobó ayer una enmienda de las leyes de Auditoría, Mercado de Valores y Sociedades Anónimas que, en la práctica, supone la eliminación de los límites al derecho de voto en las juntas de accionistas de las empresas cotizadas.
La reforma supone una victoria parcial de las tesis defendidas por grupos como ACS, primer accionista de Iberdrola, con el 12%; y de Sacyr, que controla el 20% de Repsol. En ambos casos, las dos constructoras podrán ejercer el voto sobre la totalidad de sus acciones en las juntas de sus participadas, que actualmente está limitado al 10%. Pero no será de manera inmediata.
Para llegar al acuerdo parlamentario, el grupo socialista ha tenido que asumir las principales demandas de CiU, que, desde el principio, exigió un año de transición antes de que la nueva normativa fuera efectiva. El PSOE tambiíén ha aceptado que se excluya de la reforma a las compañías no cotizadas, una decisión aplaudida ayer por las sociedades de capital familiar.
Tras el trámite del Congreso, la ley será debatida en el Senado, con lo que su aprobación y publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) podría retrasarse hasta antes del verano. Esto significa que la supresión de los blindajes no será efectiva hasta mediados de 2011.
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Reacciones
Iberdrola declaró ayer el total respeto a la voluntad del Parlamento, a la espera de lo que le suceda a la ley durante su trámite en el Senado. Más contundentes fueron las declaraciones de los portavoces parlamentarios del PNV, que ven en la enmienda una amenaza sobre el futuro de empresas como Iberdrola o Petronor, filial de Repsol.
El diputado vasco Pedro Azpiazu denunció ayer que la enmienda “es igual de mala si entra en vigor este año o el que viene†y auguró que perjudicará a los accionistas de Iberdrola y al conjunto de los ciudadanos vascos, por el interíés del Gobierno en beneficiar a la constructora ACS.
Lo cierto es que, con la reforma en la mano, y si no se convocan juntas extraordinarias por el camino, ACS tendrá que esperar hasta la asamblea general de Iberdrola de 2012 para poder ejercer el derecho sobre la totalidad de las acciones. La compañía presidida por Florentino Píérez ha manifestado reiteradamente su intención de alcanzar el 20% de la elíéctrica, un porcentaje lo suficientemente amplio como para proponer o bloquear decisiones en la junta de Iberdrola con el apoyo de otros accionistas. Para lograrlo, necesita que desaparezcan los blindajes.
El pulso entre ACS y la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán adquirió su máxima expresión en la junta de la elíéctrica celebrada el pasado 26 de marzo. La constructora intento sin íéxito entrar en el consejo tras ejercer el derecho de representación proporcional y nombrar a su representante, el empresario Josíé María Loizaga. Pese a las alegaciones de ACS, la junta de Iberdrola rechazó el nombramiento al alegar que la constructora es competidor directo. El asunto acabará en los tribunales.
Tras la supresión de los blindajes, pactada hace quince días por el presidente del Gobierno, Josíé Luis Rodríguez Zapatero, y el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, el Ejecutivo vasco se adelantó ayer para anunciar que mantiene contactos con Iberdrola y ACS para que la elíéctrica siga en el País Vasco.