INICIO FOROS ÍNDICES DIVISAS MATERIAS PRIMAS CALENDARIO ECONÓMICO

Autor Tema: Los extranjeros se quedan: Son los dueños del 48 % de nuestra deuda ...  (Leído 363 veces)

anna

  • Visitante
Los extranjeros se quedan: Son los dueños del 48 % de nuestra deuda y del 38 % de la Bolsa
 
Marí­a Martí­nez
Invertia.com

¿Miedo a España? Los inversores extranjeros no lo tienen, a tenor del montante de deuda y acciones que tienen en cartera. En febrero de este año, los no residentes poseí­an 215.946 millones de euros en tí­tulos del Estado, el 48% del total. En acciones de empresas cotizadas, eran dueños del 38,5% y moví­an el 62% del negocio total. Además somos más internacionales: En 2009, más de la mitad de los ingresos del Ibex vinieron de fuera de nuestras fronteras, y a ninguno de los grandes emisores de deuda corporativa le bajaron el rating.

A pesar de las arremetidas del Financial Times, de The Economist y de otros próceres contra España, los no residentes siguen, hasta el momento, confiando en el paí­s. Al menos esto es lo que se deduce de sus inversiones tanto en renta variable como en deuda que, lejos de reducirse, se mantienen.

En febrero de 2010, los extranjeros controlan el 48% de los 447.206 millones de euros de la deuda anotada del Estado español. Este porcentaje no ha hecho sino aumentar desde el año 2003, cuando la deuda española en manos extranjeras alcanzaba el 36,3%.

Tambiíén los extranjeros dominan el negocio de la bolsa. Los extranjeros han mantenido e incluso en los dos años largo de esta crisis su actividad en el mercado español. Más del 60% del negocio diario que se hace en la Bolsa española viene de fuera y con los últimos datos de cierre de 2008, son los dueños del 38,5% de las acciones, o sea, de las empresas.

EL EMPUJE ASIíTICO

La tenencia de deuda está experimentando algún que otro cambio desde 2008, año de la quiebra de Lehman y del inicio de la actual crisis financiera. Los inversores asiáticos, especialmente los chinos, han pasado de tener cerca del 10% de la deuda española en 2008 a casi el 20% en febrero de este año, situándose como los segundos mayores tenedores por detrás de Francia, paí­s que ha pasado del 22% a superar el 25%.

China, en concreto, tení­a en deuda española un 0,04% en 2000, porcentaje que disparó al 5% en 2008 y que ahora se ha duplicado. Frente a este paí­s, Japón, Italia, Alemania y Reino Unido, principales inversores no residentes hace dos años, han reducido ligeramente su inversión, mientras que Amíérica la ha aumentado, según los últimos datos del Tesoro.

Sin embargo, esta situación podrí­a cambiar a lo largo de este año. “El superávit comercial y exterior de China está generando un ahorro terrible, un exceso de reservas que el Gobierno va invirtiendo donde puede, barajando todas las posibilidades”, comenta Alexis Ortega, socio director de Finagentes Gestión. Pero este experto duda de que China siga aumentando su inversión en deuda española.

“Grecia acudió a China para colocar su deuda y fue rechazada. Además, el vicepresidente del banco central del paí­s afirmó que Grecia era sólo la punta del iceberg y que sus problemas habí­a que extenderlos a otros paí­ses como España e Italia”, en su opinión los principales escollos para la zona euro, recuerda. Un comentario que refuerza la posibilidad de que en el futuro el capital chino sea menos generoso con España.

Otro de los cambios que se aprecian en este tiempo está en el tipo de inversor, ya que los bancos centrales han aumentando considerablemente la participación extranjera en la deuda española. De hecho, si en 1999 apenas suponí­a el 2,4% de las tenencias de los no residentes, en 2008 ya alcanzaba el 24%, para pasar al 33,66% a finales de febrero del presente ejercicio.

“Los bancos centrales han elevado su peso en la deuda por polí­tica de liquidez”, asegura Ortega. “La banca necesitaba dinero y, ante la falta de críédito, tuvieron que liquidar sus inversiones. Los bancos centrales querí­an que las entidades tuvieran dinero y compraron la deuda a los bancos, hasta el punto que en EE UU, la Fed llegó a comprar letras y pagaríés de empresas”, explica.

Tambiíén las familias y empresas han aumentado su tenencia de deuda gracias, sobre todo, a la mayor actividad de estas últimas. El peso de este grupo roza el 27,5%, mientras que por el contrario, las entidades financieras, los seguros y los fondos de inversión y pensiones han disminuido su participación, ante las dudas sobre la solvencia de la deuda española.

Sin embargo, los mensajes negativos sobre la deuda española –amplificados por los problemas de Grecia- no significan que el Estado vaya a tener problemas para financiarse, sino que tendrá que pagar un diferencial alto. Cabe recordar que el rating de la deuda a largo sigue a niveles máximos (triple A para Moody´s y Fitch), mientras que S&P lo bajó un escalón a AA+.

ACTIVOS EN BOLSA

Los extranjeros tambiíén supieron aprovechar el buen año que vivió la Bolsa española en 2009 y que la llevó a ser la de mayor revalorización de las grandes plazas internacionales, al subir un 30%. Pero tambiíén saben sacar partido a la crisis y ganar, con ello, cuota de mercado. “Los inversores nacionales están más mediatizados por la situación, mientras que los foráneos, mayores en número, intentan diversificar más sus carteras”, explica un experto del mercado. Así­, mientras que las familias salen de Bolsa, los inversores extranjeros aumentan su presencia.

Si en 2006 el 32% de las acciones españolas eran propiedad de los inversores extranjeros, a principios de 2009 –últimos datos disponibles- poseí­an un 38,5%. En cuanto a la compraventa son lí­deres, ya que más del 62,26% del negocio bursátil está en sus manos.

ACTIVIDAD CENTRADA EN 5 VALORES

Según los últimos datos publicados por la Dirección General de Inversiones Exteriores, en el primer semestre de 2009, el 99,8% de la inversión foránea en valores negociables correspondí­a a acciones y el 0,2% a fondos de inversión. Los flujos de inversión extranjera en acciones cotizadas, además, siguen concentrándose en un número muy limitado de compañí­as.

El 78,7% del volumen total negociado entre enero y junio de 2009 se dirigió a cinco empresas y este porcentaje se elevó al 86,7% si se incrementa a diez el número de compañí­as. Los valores más contratados corresponden a Telefónica, que se coloca en primer lugar con un 26,7% del total, seguido por Banco Santander, con el 25,2% y BBVA con el 12,5%.

En 2009, más de la mitad de los ingresos del Ibex provinieron de la inversión extranjera, “buen indicador de que el castigo a la Bolsa no está justificado sólo por el riesgo paí­s”, según apunta Miguel Llorente, gestor de patrimonios de Capitalatwork, quien está convencido de que el dinero extranjero seguirá llegando a la Bolsa española.

“El temor a que España se convierta en una nueva Grecia ha hecho que los fondos de pensiones reduzcan su inversión, pero los institucionales que disponen de mayor libertad para invertir ven en España una buena oportunidad por el castigo sufrido hasta ahora”, comenta.

Asimismo, recuerda que la debilidad del euro beneficia a las empresas españolas cotizadas con negocios en el exterior, entre las que se encuentran los pesos pesados del Ibex. Tambiíén argumenta la mayor confianza de los inversores extranjeros en compañí­as como Santander o Telefónica (que conocen muy bien) que en el Reino de España, lo que ayuda a que desplacen su dinero hacia este tipo de activos.

“Además, se trata de importantes emisores de deuda, que han cubierto sin problemas todas sus emisiones, la mayorí­a de las cuales están domiciliadas en otro paí­s y dirigidas a extranjeros.