El presidente de Isolux Corsán y accionista de referencia de T-Solar, Luis Delso (Madrid, 1952), responde por primera vez a la amenaza sobre el negocio de las renovables despuíés de que el Gobierno anunciase una profunda reforma del sistema tarifario, que podría traducirse en un fuerte recorte de las primas, con carácter retroactivo.
En una entrevista con EXPANSIí“N, Delso, obligado a posponer la salida a bolsa de T-Solar, tambiíén responde a los ataques de otros empresarios del sector, como Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, al que acusa, junto al resto del lobby elíéctrico, de ser el causante del encarecimiento de la electricidad. “La subida de la luz tiene como origen principal las incongruencias del propio sistema tarifario y la presión de los lobbies elíéctricos para que íéste no cambieâ€.
Para Delso, “el propio sistema es el generador de un díéficit tarifario insostenibleâ€, por lo que aboga por “la eliminación de estas sobreretribuciones y el cambio de sistema, que permitiría financiar las energías renovablesâ€.
El socio de T-Solar pone el acento en el Real Decreto por el que se reconocen a las grandes compañías elíéctricas 7.725 millones de derechos acumulados de cobro por el díéficit de tarifa. En su opinión, “se trata de derechos legítimos de acuerdo con el sistema actual y que habrá que pagar, al igual que hay que pagar cualquier otro derecho de cobro adquirido que estíé basado en el actual sistema regulatorio. No puede haber retroactividad con ninguno de estos derechos, ya que atenta contra el Estado de Derechoâ€.
El empresario no esconde la necesidad de un cambio del sistema tarifario. Pero, “lo que se impone es que se cambie todo aquello que sea necesario cambiar, empezando por el propio sistema tarifarioâ€.
La clave está, en su opinión, en que “resulta más fácil cercenar derechos adquiridos y amputar el crecimiento de las energías renovables solares, que no vienen acompañadas por los lobbies tradicionales, que acometer con valentía el cambio del principal factor del díéficit tarifario actual. O se atacan todos los factores o no se conseguirán resultadosâ€.
Según Delso, llevar a cabo un cambio regulatorio parcial, no servirá de nada. “Es necesario acometer un cambio regulatorio en su conjunto. Es evidente que los costes de la energía elíéctrica aumentan por la incidencia de las primas a las energías renovables y a las centrales de ciclo combinado, que tambiíén son necesarias para dar fiabilidad al sistema. Pero, si mantenemos el actual esquema de retribuciones, los consumidores seguirán soportando unos costes superiores a los dos factores anteriormente señalados, que parecen justificados, ya que se seguirá sumando, a dicho incremento de costes, las sobreretribuciones que perciben las centrales nucleares y las hidroelíéctricasâ€.
Juego de intereses
La diferencia consiste, en su opinión, en que “mientras que las primas a las renovables son, además de necesarias, visibles y fáciles de calcular; los excesos de retribución a las nucleares e hidroelíéctricas, los llamados windfall profits, (beneficios sobrevenidos) son invisibles y, además, no tienen la más mínima justificación económica. “O es que no recordamos los CTC (compensaciones por el parón nuclear) que, en un principio, eran 8.000 millones de euros y acabaron en 12.000 millones. CTC que, por cierto, no están liquidados, pero si cobradosâ€.
En defensa de las renovables, Delso añade que “seguir metiendo la cabeza bajo el ala y culpar al único factor que es visible, además de injusto, supone mantener unos derechos injustificados a favor de los grandes grupos elíéctricos y en perjuicio del consumidor. En su opinión, este error, traslada a las generaciones futuras unos díéficit tarifarios que se alimentan principalmente por estas sobreretribuciones no justificadasâ€.
Delso cree que el debate es interesado. “Es lógico que cada subsector presente sus argumentos, pero lo que no es de recibo es que se oculte al consumidor la realidad de los hechosâ€, manifiesta.
Según su versión, se ha elegido la vía de buscar un chivo expiatorio (la energía solar) por los grandes lobbies elíéctricos cuando es, precisamente esta tecnología la que mejor se adapta la dotación de recursos naturales y en la que España estaba teniendo un puesto relevante en el concierto internacional. “No es de extrañar que el Gobierno haya sucumbido, una vez más, a la presión de los lobbies elíéctricos. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, ha tenido la ocasión y la oportunidad de ser el primero en enfrentar el tema de forma adecuada y en su conjunto. Pero no ha sido asíâ€.
Según Delso, por esta vía “se conseguirá incrementar el riesgo país de España, generándose una inseguridad jurídica de consecuencias imprevisibles que afectarán tambiíén a otros sectores de la economía (concesiones, infraestructuras, obras públicas)â€. Y todo ello para “mantener sine die unos derechos de los grandes lobbies y las grandes compañías elíéctricas, injustificables en el momento actualâ€.
Nucleares e hidroelíéctricas, en el ojo del huracán
Delso afirma que existe una sobreretribución de la energía nuclear e hidroelíéctrica. El empresario indica que “existen artículos serios e investigaciones de expertos del sector que denuncian este fenómeno†desde hace años. Asegura que la CNE lo ha estimado en varias ocasiones.
“El último estudio realizado para el tercer cuatrimestre del 2008, concluía señalando que la sobreretribución de las nucleares e hidroelíéctricas, se había situado entre 550 y 1.100 millones de euros, dependiendo de que se considerase que los costes fijos de dichas tecnologías estaban totalmente recuperados o noâ€. En ese mismo periodo, las primas a todas las energías renovables, ascendió a 600 millones de euros. “La comparación evita cualquier comentarioâ€.
Retroactividad
“No puede haber retroactividad con ninguno de los derechos de cobro adquiridos, ya que atenta contra la seguridad jurídica en un Estado de Derechoâ€.
Chivo expiatorio
“Se ha elegido la vía de buscar un chivo expiatorio (la energía solar) por los lobbies elíéctricos, cuando es la que mejor se adapta la dotación de recursos naturalesâ€.
Sebastián
“El ministro de Industria, Miguel Sebastián, ha tenido la oportunidad de ser el primero en enfrentar el tema de forma adecuada y en su conjunto. Pero no ha sido asíâ€.