Las acciones de las mineras australianas se desplomaron el lunes luego de que el Gobierno dijo que aplicará un impuesto del 40 por ciento a las ganancias del sector para mejorar el ingreso de los trabajadores en un año electoral, lo que podría causar una píérdida de inversiones.
Los títulos de los gigantes de la minería Rio Tinto y BHP Billiton cayeron con fuerza por la medida, que Canberra espera genere un aumento de 11.000 millones de dólares en los primeros dos años y ayude a financiar los fondos de pensión.
El Gobierno de centro izquierda puso al sistema tributario en el centro de su agenda pre electoral y defiende su propuesta frente a las afirmaciones de la industria que dan cuenta de que en una sola región deberán revisar inversiones por más de 100.000 millones de dólares.
El primer Ministro Kevin Rudd dijo que los australianos no habían recibido todo lo que debían durante el boom de los ingresos mineros, que en los últimos 10 años habían crecido más de 80.000 millones de dólares y sólo aportaron 9.000 millones adicionales a las arcas públicas.
“El 40 por ciento de BHP está en manos extranjeras, y en el caso de Rio Tinto es más del 70 por ciento. Eso implica que ese inmenso aumento de las ganancias (…) obtenido de recursos australianos se va mayormente al exteriorâ€, dijo Rudd a una radio.
El tributo entrará en vigencia a partir del 2012 y causó escalofríos en la industria minera, en particular en las empresas que estaban en proceso de fusión.
Las acciones de Macarthur Coal cayeron un 9,5 por ciento, lo que sugiere que la estadounidense Peabody Energy podría retirar su oferta de 3.700 millones de dólares.
Según los tíérminos de la reforma impositiva develada el domingo, los trabajadores recibirán aumentos salariales ya que el nuevo tributo a la minería financiará parte de un recorte previsto de los gravámenes corporativos y porque exige a las empresas a subir el aporte a los fondos de retiro.
La principal región minera del oeste de Australia advirtió que se perderán empleos, sin cuantificarlos, mientras que BHP Billiton, Rio Tinto y Xstrata , dijeron que las inversiones están en riesgo.
Los inversores vendieron acciones de las mineras, empujando al sub índice un 2,5 por ciento a la baja, por encima del mercado general que retrocedió un 0,5 por ciento.
“Habrá muchos inversores en compañías australianas que van a vomitar sobre sus cereales cuando lean estoâ€, dijo Richard Morrow, de E.L. & C. Baillieu.
GOBIERNO VS MINERAS
El Gobierno atizó la pelea con la mayor industria individual del país, que representa la mitad de las exportaciones, en una jugada que busca captar el favor de los votantes en un año electoral
El plan de Rudd puede haber disgustado a firmas del sector, pero ayudaría a impulsar su popularidad.
Con una sólida ventaja en los sondeos de opinión, y una elección programada para fines del 2010, analistas dijeron que la iniciativa posiblemente sea bien recibida por la población, junto a otras buenas noticias que serían anunciadas en el presupuesto nacional el 11 de mayo.
Nick Economou, analista político de la Monash University de Melbourne, dijo que la medida podría contar con apoyo popular.
“Despuíés de todo, quíé podría ser más popular que un impuesto que hace que la industria minera pague más impuestos por sus enormes ganancias, para poner más dinero en nuestro fondos de pensiones?â€, señaló.