El gobierno de Francia demandó el martes una compensación de parte de Bolivia por la nacionalización de una planta generadora de electricidad que fue propiedad parcial de la compañía francesa GDF Suez.
Policías y soldados bolivianos ocuparon el sábado cuatro centrales elíéctricas, horas antes de que el presidente Evo Morales anunciase que estaban siendo nacionalizadas, en una expansión del control estatal de varias industrias clave.
Entre las centrales está una de Empresa Corani SA, una compañía hidroelíéctrica operada por GDF Suez, que a su vez es propiedad en parte del gobierno francíés.
"La nacionalización deberá ser acompañada de una compensación pronta y adecuada, calculada sobre la base del valor real de la inversión en la fecha de la expropiación", dijo el portavoz de la cancillería francesa Romain Nadal.
GDF Suez dijo en un mensaje electrónico a The Associated Press que había "tomado nota" de la nacionalización y que "respeta la ley del país en el que opera, al tiempo que defiende sus intereses como un grupo bajo las leyes nacionales e internacionales".
GDF Suez ha sido dueña de 50% de la hidroelíéctrica Corani desde 2008, tras su adquisición de la empresa estadounidense Ecoenergy. El gobierno francíés es dueño de 36% de GDF Suez.