Al igual que las bolsas, los mercados de deuda corrigen en apenas unas horas buena parte de todo el descalabro de la semana pasada. Los 750.000 millones de euros de ayudas y el inicio de la compra de bonos por parte del BCE relajan drásticamente las primas de riesgo de Grecia, Portugal, Italia, Irlanda y España. En este último caso el riesgo país se reduce un 41% desde el viernes, en línea con la mejora que logran sus seguros de impago (CDS).
Los multimillonarios acuerdos alcanzados esta madrugada alivian las tensiones ríécord que habían alcanzado los mercados de deuda y derivados, y que habían encarecido la financiación de los países perifíéricos de la zona euro.
Los inversores frenan en seco el 'vuelo hacia la calidad', radicalizado durante las últimas fechas. De hecho, las caídas alcanzan hoy al bono alemán a diez años, de forma que su rentabilidad recupera el 3% por primera vez desde el pasado 4 de mayo.
El drástico ajuste en las carteras restaura parte de la confianza perdida en la deuda española. Las compras reaparecen, y rebajan la rentabilidad del bono a diez años hacia el entorno del 4%, en paralelo a las noticias sobre el inicio de la compra de bonos por parte del BCE. Esta mañana ya se ha puesto manos a la obra y se ha lanzado a la compra de deuda de los países miembros de la zona euro, y lo hace con especial hincapiíé "en los países con mayores dificultades", según apunta Reuters, citando a "fuentes monetarias y bancarias italianas".
El resultado es que el diferencial de España se estrecha desde los 170 puntos básicos del cierre del viernes hasta los 102 (4,01% frente al 2,99%). El descenso en cerca de un 40% del riesgo país de España se traslada tambiíén al mercado de derivados. El coste de asegurar 10 millones de deuda española a cinco años se abarata desde los 238.000 dólares del pasado viernes hasta los 157.000 dólares.
La relajación se deja sentir de lleno tambiíén en otros mercados perifíéricos. Los seguros de impago (CDS) de Grecia se reducen desde los 915 hasta los 657 puntos básicos. Los de Portugal se moderan desde 425 hasta 263, los de Irlanda desde 257 hasta los 171, y los de Italia desde los 225 hasta los 145.
Grecia vuelve a salir especialmente favorecido en el mercado de deuda. El diferencial de rentabilidad de su bono a diez años frente al bund alemán cae desde los casi 1.000 puntos que llegó a rozar hasta los 464 puntos básicos, sus mínimos desde el pasado 20 de abril.