A medio plazo, el Gobierno está abocado a una nueva subida fiscal si quiere cuadrar sus cuentas con las políticas de austeridad que impone el plan de rescate europeo. No es algo que sorprenda al Ejecutivo. Los recortes de mañana irán más por la vía del gasto.
Pero a partir de ahí empezará el verdadero debate de ingresos: a fin de cuentas, en Hacienda dibujan diversos escenarios de alzas fiscales para cuando llegue el momento político adecuado.
Los Presupuestos de 2011 se antojan como un escenario propicio. El Banco de España allanó el camino la semana pasada cuando calificó de “inevitable†el endurecimiento fiscal. El secretario de Hacienda, Carlos Ocaña, fue un paso más lejos y señaló el camino más probable: los Impuestos Especiales.
Avanzó que el plan de recorte del díéficit “no incorporará una gran subida de impuestosâ€. Pero esta contundente frase tiene una segunda lectura. Deja abierta la puerta al aumento de otros impuestos con menor impacto sobre la recaudación, como el gravamen sobre alcohol o hidrocarburos. Este mensaje tambiíén deja sobre la mesa la posibilidad de elevar tributación de las sicav, una iniciativa que serviría el PSOE a IU o ERC.
Una muestra de la improvisación a la hora de diseñar los recortes es que se mantendrán las previsiones oficiales: “Estamos cómodos con ellasâ€, dijo Ocaña. Sin embargo, los economistas alertan de que reducir los pagos o elevar la fiscalidad retrasará aún más la recuperación. Incluso el propio Zapatero defendió esta idea la semana pasada.
Además, el Gobierno compartirá el recorte del díéficit de 15.000 millones con las CCAA y ayuntamientos, algo que, para Ocaña, será “relativamente fácilâ€.
Todos estos movimientos se producen bajo la atenta mirada de Bruselas, que ha hecho saber a España que no dará luz verde a ningún tipo de ayuda si no le convence las nuevas medidas de austeridad. De hecho, el otro país señalado por los mercados, Portugal, anunció ayer que estudia subidas impositivas.
En España son cada vez más los expertos que apuntan en esta dirección. El jefe de coyuntura de Funcas, íngel Laborda o el portavoz del colectivo de Inspectores de Hacienda, Francisco de la Torre, advierten de que habrá que aumentar los grandes impuestos para reducir el díéficit al 3% de aquí a 2013.
Elena Salgado podría contar con apoyo de varios partidos a la hora de subir el IRPF. Además, a la vicepresidenta no le han dolido prendas a la hora de afirmar que la presión fiscal española debe tender a aumentar (ver EXPANSIí“N del pasado 12 de febrero).
Todas las figuras impositivas, de nuevo, en el punto de mira
Impuestos indirectos
El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, abrió la puerta ayer, en una comida con la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), a nuevas subidas de Impuestos Especiales.
Aunque descartó que vaya a producirse una “gran subida de impuestosâ€, no quiso pronunciarse sobre la posibilidad de que el nuevo plan frente al díéficit ponga sobre la mesa subidas de los tipos que gravan el alcohol y los hidrocarburos.
IRPF
El portavoz de la Organización de Inspectores de Hacienda, Francisco de la Torre, aseguró ayer que serán inevitables subida de impuestos en las grandes figuras impositivas durante los próximos años. A su juicio, en el punto de mira tambiíén se encuentra el Impuesto de Renta, que ya sufrió un fuerte incremento en 2010 mediante la eliminación de la deducción de los 400 euros, la promesa estrella de Zapatero en las últimas elecciones generales.
Sociedades
Los expertos tambiíén pronostican que habrá que subir antes de 2013 el Impuesto de Sociedades. Y es que su recaudación se ha reducido más de un 50% desde 2007, a pesar de que, según los datos del Banco de España, la situación de las grandes empresas tampoco ha sido tan mala. No obstante, el Banco Mundial sigue situando a España entre los cinco países de la UE con mayor carga fiscal empresarial, según el IEE.
Sicavs
Otro de los asuntos que nunca ha dejado de estar en el debate con los socios parlamentario del Gobierno es la elevación de la tributación a las sicav. Su impacto sobre la recaudación es reducido, algo que coincide con las líneas rojas que marcó ayer Ocaña: “No habrá cambios que afecten demasiado a la recaudaciónâ€, explicó. IU y ERC, aliados ocasionales del presidente en el Congreso, son partidarios de subir este impuesto.
IVA
La única decisión impopular tomada hasta la fecha por el Ejecutivo de Zapatero ha sido la de subir el IVA a partir de julio. Los expertos ponen en tela de juicio la idoneidad de esta medida, por el efecto multiplicador que tendrá sobre la economía sumergida, tal como pasó en los años noventa. En cualquier caso, la UE impuso a Grecia una subida del tributo sobre el valor añadido hasta el nivel del 23% y no sería descartable algo similar.