El regulador español hará oídos sordos al sorprendente anuncio de anoche de Alemania. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) mantendrá su política de permitir al inversor ponerse corto en renta fija al descubierto, es decir, sin tener previamente el bono. En bolsa, en España está ya prohibido apostar a la baja sin haber pedido prestados los títulos.
“No existe prohibición de ponerse corto al descubierto, no hemos detectado ninguna anomalía, por lo que no vamos a tomar medidas adicionales en el tema de los bonosâ€, comenta a este portal una fuente oficial de la CNMV. “En el tema de las acciones, ya está prohibido operar al descubiertoâ€. Además, en España hay que comunicar al supervisor cualquier posición corta que alcance el 0,25% del capital de una cotizada.
Parece por lo tanto que no se producirá el contagio de la medida adoptada por el regulador alemán Bafin al resto de países de la unión, tal y como especulaban muchos analistas esta mañana. De este modo, la eficacia de la propuesta del país teutón será mucho menor, ya que sólo afectará por lo tanto a las operaciones que se hagan dentro de sus fronteras.
Ayer por la noche, el Bafin prohibió ponerse corto al descubierto con deuda de la Eurozona. Esto quiere decir que un inversor no podrá dar una orden de venta de un bono si no lo ha pedido prestado previamente. En principio, la medida debería reducir la presión bajista sobre los activos de deuda soberana, con el consecuente aumento de precio del bono y caída de la rentabilidad. Así, bajaría el coste de financiación.
El regulador germano tambiíén prohíbe desde anoche y hasta el 31 de marzo tener un CDS (credit default swap), derivado que sirve para cubrirse del riesgo de impago de deuda, sin contar tambiíén con el bono al que protege ese CDS. Por lo tanto, las posiciones cortas en deuda solo están permitidas cuando el inversor tiene una exposición económica al riesgo de críédito de un país, resume Barclays.