Una semanas despuíés de anunciar un plan de ajuste que ha puesto en pie de guerra a casi toda la población, el presidente del Gobierno ha dado una vuelta de tuerca al insinuar otra subida de impuestos para "los que realmente tienen" capacidad económica. Dos necesidades le han llevado a este nuevo malabarismo político: la recaudatoria y, sobre todo, la de calmar a una izquierda soliviantada.
De hecho, según ha podido saber elEconomista, la propia vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, ha recibido presiones por parte de miembros del PSOE para tomar medidas de ajuste de otro cariz.
Zapatero ha lanzado un globo sonda político y, para ello, se basa en dos posibilidades que Hacienda baraja: añadir un nuevo tipo máximo al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y no modificar el actual, el del 43%, y restaurar el gravamen del Impuesto sobre el Patrimonio.
La primera de las ideas es la más factible, según han confirmado a este diario fuentes cercanas a Hacienda. Crear otro tipo por encima del actual máximo del 43% es una opción que ya estudió el equipo de Elena Salgado el pasado verano. En aquel entonces, el Gobierno estudiaba quíé subidas impositivas se incluirían en el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 2010. Subir el tipo máximo del IRPF o crear otro y elevar el IVA eran las materias de estudio.
Finalmente, se optó por subir dos puntos porcentuales el tipo general del IVA y uno, el reducido. En esta ocasión, e igualmente de cara al proyecto de ley de Presupuestos para 2011, se retoma el IRPF.
La creación de otro tipo máximo tiene dos ventajas de cara al objetivo que persigue Hacienda: se elevaría el gravamen para las rentas altas y no se alterarían los tramos medios y bajos del impuesto. De esa manera, si el tipo del 43% se aplica actualmente a partir de una renta de 53.407 euros, se pondría un límite para su aplicación, es decir, se crearía un nuevo tramo.
A partir de ese nuevo límite de renta (pongamos, por ejemplo, 70.000 euros anuales) se aplicaría otro tipo que podría incluso llegar hasta el 50%, según algunas fuentes. Siete puntos entre un tipo y otro no es tanta diferencia, ya que en el IRPF actual del segundo tramo de renta al tercero el tipo varía en nueve puntos y del tercero al cuarto, en seis puntos.
El tipo del 50% en 2010, puede parecer altísimo pero hay que recordar que, en 2006, el tipo máximo era del 45% y solamente hace doce años, en 1998, del 56%.
En el ejercicio 2007, sólo el 4% de los 18 millones (en esta campaña, se esperan 20 millones) de declarantes gozaban de una renta superior a 60.000 euros anuales.
Recuperar Patrimonio
La otra posibilidad, íésta muy barajada en círculos políticos, es la recuperación del Impuesto sobre Patrimonio. Este tributo "desapareció" oficialmente en agosto de 2008 ya que, en realidad, lo que se hizo fue bonificar el 100% de la cuota, aunque el impuesto permanece a efectos censales. La supresión se aprobó en agosto, pero tuvo efectos retroactivos desde el 1 de enero, con lo que el ejercicio de 2008 ya no se pagó.
Ahora se recuperaría "modernizado". Y esa modernización se inspiraría en el modelo francíés, en el llamado "Impuesto de Solidaridad sobre la Abundancia (o Fortuna)". Este impuesto directo vigente en Francia se aplica a partir de activos por valor de 760.000 euros, aunque entre estos no se incluyen los activos empresariales, los objetos de colección, los valores artísticos o literarios, los fondos de pensiones o las indemnizaciones por enfermedad o accidente. A
partir de la actualización de la ley del impuesto en 2007, cuando Nicolas Sarkozy alcanzó la Presidencia de la República francesa, la suma de este tributo y de todos los demás no puede exceder el 50% de los rendimientos anuales del contribuyente. Los tipos del impuesto, conocido como "de las grandes fortunas" van desde el mínimo del 0,55% (hasta 1,16 millones de euros) hasta el máximo del 1,8% a partir de los 15 millones.
La propia Elena Salgado tiene sus preferencias. Le gusta más el Impuesto de Patrimonio que subir la fiscalidad a las famosas y controvertidas sicavs.