La semana comienza como acabó la anterior, con una nueva oleada de ventas. El euro amplía sus mínimos por debajo de 1,20 dólares, y en la deuda, la prima de riesgo de España se mantiene en máximos, al borde de los 200 puntos. La bolsa española sufre otro correctivo, que aleja al Ibex de los 9.000 puntos y de sus mínimos anuales del viernes. Los bancos, junto a Grifols, destacan entre los valores más penalizados.
Los inversores se ven forzados a extremar la prudencia nada más arrancar la semana. Para entonces ya contaban con toda una serie de presiones bajistas, heredadas en algunos casos desde el pasado viernes, cuando Wall Street agravó sus caídas a última hora, hasta cerrar con descensos del 3,15% en el Dow Jones y del 3,4% en el S&P 500.
Los números rojos se repiten hoy en los futuros, con vistas a la posterior apertura de la Bolsa de Nueva York. Las primeras bolsas en zanjar la sesión, las asiáticas, han dado continuidad a esta oleada vendedora. En Tokio, el índice Nikkei se ha desinflado un 3,84%.
El mercado de divisas invita además a mantener las alertas. El euro inicia la semana por debajo de los 1,20 dólares, en zona de mínimos de más de cuatro años. A su vez, fuerza la corrección en el mercado de commodities, donde el perecio del petróleo está a punto de perder los 70 dólares.
Buena parte de la atención, no obstante, sigue centrada en el mercado de deuda pública, sobre todo en el de los países de la periferia de la eurozona. Los intentos de Hungría durante este fin de semana por matizar los mensajes de emergencia sobre su situación financiera no son suficientes para relajar una tensión que depara nuevos máximos en los diferenciales de deuda. En el caso de España, la prima de riesgo se sitúa en la apertura en 194 puntos básicos, en zona de ríécord, y al filo de la barrera de los 200 puntos.