En estos momentos en que los mercados se asoman de nuevo al borde del abismo, hay que ser muy valiente para lanzar un mensaje de optimismo y tranquilidad. Y es lo que hizo ayer la famosa Abby Cohen, analista de Goldman Sachs. Sólo hace falta que tenga razón, claro.
Cohen sostiene que las cosas están mejor en la economía norteamericana que en la del resto del mundo. "La economía de EEUU, aun con sus altibajos y con decepciones como la creación de empleo, está bastante mejor que la mayoría de las demás economías desarrolladas, incluyendo Europa Occidental y Japón".
Ahora bien, admite que los inversores deben permanecer atentos a lo que ocurre en el resto del mundo, en particular en economías con problemas como Grecia y Hungría. Pero, dicho esto, opina que la mayor parte del daño ya se ha recogido en los precios del mercado.
"Las potenciales malas noticias, incluso en los escenarios más improbables, se han descontado en las cotizaciones aquí y en Europa", sostiene.
Más que centrarse en acontecimientos aislados, como el dato de paro del viernes, Cohen pide a los inversores que se fijen en el escenario general. "Creemos que hay que empezar, por supuesto, por la salud de la economía, si el PIB seguirá creciendo y si el empleo empezará a mejorar", señala. "Será lo fundamental en los próximos trimestres", concluye.