Por... JUERGEN BAETZ
BERLIN -- La canciller alemana Angela Merkel convocó el domingo a su gobierno a que respalde plenamente las medidas de austeridad, un día despuíés de que miles de alemanes saliesen a las calles para protestar contra el plan.
Toda la coalición de centroderecha debe ahora apoyar la decisión de aprobar el paquete y explicar las medidas a sus votantes, dijo Merkel al periódico Bild am Sonntag.
"Solamente podemos conseguir confianza de la opinión pública si defendemos nuestras decisiones", dijo Merkel.
La jefa del gobierno alemán anunció el lunes planes para reducir el presupuesto del país por unos 80.000 millones de euros para 2014, con un paquete que incluye aumentos de impuestos y recortes de beneficios sociales por 30.000 millones de euros.
Las medidas han sido duramente criticadas por la oposición, pero tambiíén han causado divergencias entre la coalición gobernante.
Varios políticos de la Unión Cristiano Demócrata, de Merkel, dijeron que compartían la opinión opositora de que las medidas de austeridad estaban dejando caer la mayor parte de la carga social en los hombros de los más díébiles. Los políticos llamaron a aumentar los impuestos a los más ricos, algo que Merkel rechazó.
El Partido Democrático Liberal, socio de la coalición, calificó a algunos de sus aliados conservadores de "jabalíes". La Unión Social Cristiana de Bavaria, tercer partido de la coalición, replicó que los demócratas liberales eran "un montón de pepinos".
"Merkel pierde el control de la coalición", dijo el titular del influyente diario Sueddeutsche Zeitung en su edición del fin de semana.
Las disensiones se producen en un momento difícil para Merkel, que trata de asegurar la mayoría para el candidato de su partido en los comicios presidenciales del 30 de junio.