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Autor Tema: Letras y depósitos, empatados en rentabilidad  (Leído 347 veces)

Eguzki

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Letras y depósitos, empatados en rentabilidad
« en: Junio 16, 2010, 08:10:56 am »
La creciente desconfianza sobre la deuda soberana española provoca que los inversores estíén exigiendo rentabilidades cada vez más altas al Estado para comprar su deuda. El Tesoro Público está pagando por las letras lo mismo que cuando los tipos de interíés oficiales se encontraban en el 3,75%, en octubre de 2008, pero ahora se sitúan en el 1%.
Es más, a los niveles actuales se acercan ya al interíés medio de los depósitos de la banca, lo que vuelve a situar a las letras en la lista de posibles alternativas para el ahorrador. “Con los niveles actuales es una decisión sensata contemplar este activo como una alternativa de inversión”, explica Pablo Guijarro, analista de AFI.

En la subasta de ayer, el Tesoro Público tuvo que pagar rentabilidades del 2,45% y del 2,9% para vender letras a 12 y 18 meses, respectivamente, 2,7 veces más que el 0,9% de abril para el primer caso y 1,4 veces más para los tí­tulos a más largo plazo. De ahí­ la fuerte demanda que recibió, de 9.700 millones frente a los 5.168 millones que colocó finalmente, lo que, a su vez, atempera los miedos sobre posibles dificultades para colocar la deuda.

Guerra del pasivo

Según datos del Banco de España, la rentabilidad media de los depósitos que se contrataron en abril osciló entre 2,3% y 3,07% para plazos de hasta uno y dos años, respectivamente. Aunque, no obstante, la reciente guerra del pasivo ha provocado que entidades como Santander, BBVA, Banesto, Sabadell, CAI, CAM o Bancaja, entre otras, hayan ofrecido un 4% a 12 meses, en función del importe o la vinculación del cliente.

Pese al creciente atractivo que están ganando las letras para el pequeño inversor, Alberto Constans, director de Premier, Investments y Pasivo de Barclays en España, indica que, normalmente, las emisiones de deuda del Tesoro son cubiertas en un gran porcentaje por clientes institucionales (bancos, aseguradoras, fondos de inversión, fondos de pensiones).

De hecho, según datos del Tesoro Público, de un saldo vivo total de letras, que alcanzaba en abril los 80.000 millones, sólo un 2,25% (1.800 millones) se encontraba en manos de particulares españoles y un 30,82% (24.656 millones)en bancos y cajas, que tienen el incentivo de sacarle provecho al carry trade que consiguen con las subastas del Banco Central Europeo. Sin embargo, el directivo de Barclays apunta que “si la rentabilidad de estos activos sigue aumentando, los particulares estarán más interesados en invertir parte de sus ahorros en este tipo de productos”.

El depósito, por el contrario, es el vehí­culo por antonomasia del inversor minoritario. La fuerte aversión al riesgo y los atractivas ofertas lanzadas por la banca para captar recursos y clientes han provocado que el saldo de imposiciones a plazo se dispare en los últimos años. En julio de 2007, los hogares españoles tení­an 293.319 millones de euros en depósitos. Al cierre de abril, último dato del Banco de España, el volumen habí­a repuntado hasta los 393.417 millones de euros. Es decir, en tres años, bancos y cajas han atraí­do pasivo por más de 100.000 millones, incrementando el saldo total en un 34%.

Riesgo paí­s, en máximos

La mayor desconfianza hacia la economí­a española se está plasmando en el aumento del riesgo paí­s o diferencial entre los bonos alemanes y los españoles a un plazo de diez años. Ayer se situó en 206 puntos básicos, lo que implica que el Tesoro español debe ofrecer 2,06 puntos porcentuales más (4,738%) que el germano (2,674%) por atraer el apetito de los inversores. Fuentes de un banco español explican que el atractivo de las letras, frente al de los depósitos, dependerá de cómo evolucione el riesgo y credibilidad de nuestro paí­s.

Ello está provocando que cada subasta que celebra el Tesoro se convierta en un test importante con los inversores, cuando se enfrenta a una ola de vencimientos en los próximos meses. Sólo en julio, cuentan con compromisos de 7.643 millones en letras, otros 16.164 millones en bonos y obligaciones y 820 millones más en deuda en divisa diferente al euro.

Las noticias procedentes de los medios alemanes, en los que se asegura que la Unión Europea prepara un plan de rescate para España, tampoco ayudan a recuperar la confianza. Y el lunes, de nuevo otra agencia de calificación (Moody’s) tomó la decisión de rebajar a niveles de bono basura el ráting de Grecia.

Tres ví­as para comprar

1. Los inversores pueden contratar las letras en cualquier sucursal del Banco de España (hay 23 en España) mediante la apertura de una cuenta directa.

2. A su vez, lo puede hacer a travíés de cualquier entidad o intermediario financiero. Aunque, aumentan los gastos de operación (comisiones) por esta ví­a.

3. Se puede operar a travíés de la página web del Tesoro Público, mediante la obtención de un certificado en la página web de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre.

La banca tiene de nuevo el incentivo del ‘carry trade’

Bancos y cajas españoles han devorado la deuda pública del Tesoro. El saldo vivo de deuda (bonos y letras) en manos de la banca asciende a 147.502 millones, un 37,98% del total. Y es que con las rentabilidades actuales, “el incentivo de la banca por invertir en deuda pública aumenta porque despuíés pueden usarla como aval en las subastas del BCE”, explica Josíé Carlos Dí­ez, economista jefe de Intermoney.

A esta estrategia se le ha denominado carry trade. El BCE le pide a la banca un activo como aval para darle príéstamos al 1%. Las entidades sacan tajada usando unos bonos y unas letras en las subastas que cada vez dan más rentabilidad. Por ejemplo, con las letras a doce meses de ayer, que rinden un 2,4%, si se usara como aval, se obtendrí­a dinero al 1% y aún se le sacarí­a un margen del 1,4%. Una práctica que, sin duda, viene muy bien como apoyo a la cuenta de resultados, porque aumenta el margen de intereses.