Alierta burla los intereses lusos y se asegura el voto del 8% en la junta de PT
por V. SANCHIDRIíN en Negocio.com
Nuevo movimiento de Telefónica para ganar la batalla de control de la operadora brasileña Vivo, cuyo objetivo final es fusionarla con su negocio de telefonía fija de Telesp.
Tras fracasar en el intento de convencer a los accionistas extranjeros de Portugal Telecom (PT) a travíés de un dividendo de 900 millones si aceptaban su oferta, la compañía que preside Cíésar Alierta no podía estar de brazos cruzados esperando a que el presidente de la junta de accionistas de la lusa, António Menezes Cordeiro, el mismo que bloqueó este dividendo, decidiera admitir o no que Telefónica votara en la junta de accionistas del 30 de junio.
Era una decisión que podía tomar legalmente hasta el mismo día de la junta, y el voto de Telefónica (8,5%) era de suma importancia, porque su presencia ayudaría a contrarrestar el fuerte peso de los votos de capital portuguíés, que suman alrededor de un 30% (la mitad, el 15% ya se ha mostrado en contra de la operación).
Así, sin más dilación y a una semana de la asamblea donde la operadora necesita conseguir la mayoría simple del capital , Telefónica decidió reaccionar por sorpresa para asegurarse el voto del próximo miíércoles a su favor. ¿Cómo? Colocando un 8% en el mercado, un movimiento, que nadie había barajado en el mercado antes y que ahora tildan de "decisión inteligente", según una nota que emitió ayer la firma Bermsteilm.
La multinacional española, que no precisó ningún detalle sobre la operación, indicó en un hecho relevante al cierre del mercado que su participación actual en PT se había reducido a 18,122 millones de acciones, correspondiente a un 2,02% del capital social y de los derechos de voto de PT. Hasta ayer, la compañía contaba con un 8,5% de forma directa y de un 1,5% indirecta. "Tal información será completada con las comunicaciones legales exigibles en los plazos establecidos al efecto", añadió Telefónica.