¿A donde vamos a parar?
El mundo está loco. Antes esto lo decían nuestros abuelos sorprendidos del discurrir de las costumbres. Ahora lo decimos todos seamos abuelos, o no.
Estamos atravesando una íépoca muy difícil y muchos nos sentimos desorientados, tristes y decepcionados. Las cosas han dado un giro que no esperábamos y el miedo circula libremente por el mundo mientras nosotros nos sentimos agarrotados sin saber hacia donde mirar. Los lamas tibetanos dicen que estamos en la epoca del Kaliyuga, para otros esto es la consecuencia del karma, pero esto no nos resuelve el problema, porque sea lo que sea, la verdad es que estamos bien fastidiados.
Díéjame preguntarte algo, si me lo permites:
¿Como te sientes? ¿Cómo esta tu animo, tu familia, tus relaciones laborales y tus ingresos? …¿Te ha ocurrido alguna vez que de la noche a la mañana toda se ha vuelto al revíés y te sientes como si tu vida fuera un tejado que cuando arreglas una grieta aparece otra gotera de similares condiciones y despuíés otra y otra y nunca consigues poner fin a esas filtraciones?.
Para consolarnos nos decimos que “la vida me pone a prueba†pero eso yo no me lo creo mucho, porque a estas alturas todos hemos superado ya muchas crisis, y sin embargo, cuando llega el momento critico, seguimos tropezando en la misma piedra y nos quedamos sentados en el hoyo, sin saber como salir de agujero. ¿Reconoces haber pasado por esa situación alguna vez?
Perfecto, porque yo tambiíén he vivido eso y me identifico con todo lo dicho anteriormente.
Ahora tendría que decirte eso de que la mente crea y que todo esto es consecuencia de acciones previas, que somos responsables de nuestra vida y de nuestra creación mental, y otras cuantas cosas más que son ciertas, ciertísimas, te lo puedo confirmar, pero que en estos momentos tu no quieres escucharlas y a lo único que aspiras es romper el núcleo en que te encuentras y salir de ahí de una vez, por consiguiente, mis verdades metafísicas no te van ser muy útiles y las dejaremos para otro día en que ya más liberado, me prestarás atención, y podríé hablar contigo sobre la ley de atracción, que te ayudará a comprender lo que te ha ocurrido ahora.
Mientras tanto, vamos a sacar una buena daga y cortar las amarras de todo ese lastre que llevas a cuesta. ¿Estas de acuerdo?