Hollywood busca su nuevo maná en las películas inspiradas en la crisis
por Alba Redondo en Expansión
Una crisis para salir de otra. í‰se es el plan maestro de las productoras de Hollywood. Inmersa en una profunda crisis de creatividad desde hace años, la meca del cine cree haber encontrado un nuevo filón en las películas sobre las dificultades económicas.
Tras años de probar suerte con sagas y reinterpretaciones de películas clásicas o de otras nacionalidades, los productores parecen haber puesto el foco en tramas relacionadas, directa o indirectamente, con la crisis. El claro ejemplo de ello es Wall Street. A finales de los años 80, Oliver Stone firmó una película que acabó por convertirse en un clásico.
Narraba las aventuras de Gordon Gekko (papel que le valió un Oscar a Michael Douglas), un tiburón de Wall Street, y de su joven aprendiz, Bud Fox (al que daba vida un jovenCharlie Sheen). Gekko se hizo famoso por su carisma y su total falta de escrúpulos. Prueba de ello, una frase, la más famosa del filme: “La avaricia es buenaâ€.
Veintitríés años despuíés, Gordon Gekko regresa a las pantallas. Wall Street 2: El dinero nunca duerme se estrenará en septiembre. Douglas retomará su papel como Gekko, que busca ahora lavar su nombre y recuperar la relación con su hija. Para ello, ayudará al novio de íésta, un joven bróker (Shia LaBeouf), a vengar a su mentor, implicado mediante engaños en una estafa. Stone vuelve a estar al otro lado de la cámara.
Fuente de inspiración
Wall Street es el caso más claro de que Hollywood busca inspiración en la crisis, pero no el único. En los próximos meses se estrenan varios filmes relacionados con la crisis, como Takers o The Company Men (ver información adjunta). El año pasado tambiíén llegaron a las pantallas varias películas ligadas a las dificultades económicas.
Enemigos Públicos, protagonizada por Johnny Deep, fue una de ellas. Se trataba de la biografía de John Dillinger, famoso ladrón de bancos que se convirtió en el primer gánster al que el FBI denominó ‘enemigo público’. Fue en otra crisis, una que coincide en muchos aspectos con la actual: la Gran Depresión.
El políémico documentalista Michael Moore tambiíén presentó al mundo su visión de la crisis en 2009. Wall Street: Una historia de amor denunciaba los excesos que la banca cometió durante los años de bonanza.
Bernard Madoff, autor de la mayor estafa piramidal de la historia, tambiíén ha sido fuente de inspiración para los cineastas. Madoff: el mayor estafador del mundo da cuenta de las prácticas del ex presidente de Nasdaq durante años. Además recoge interesantes declaraciones del inversor. Poco antes de ser detenido, aseguró en una conferencia que “el sistema no te permite violar la ley. Es casi imposibleâ€.
Los bonos basura, rutina
La gran pantalla, y la pequeña. La crisis tambiíén se ha hecho un hueco en la temática de los productos televisivos. La serie Hunk cuenta cómo un ex ejecutivo de WallStreet se adapta a su nueva vida en el paro. Castle, que sigue las aventuras de una detective y un escritor, tambiíén ha recogido la recesión. En un capítulo de la primera temporada, hacían referencia a los estragos que habían causado las turbulencias económicas en Nueva York. En la segunda temporada, ahondaron más en esta idea. Uno de los capítulos investigaba el asesinato de un joven cuya familia lo había perdido todo por la crisis. El título del capítulo: El chico de los bonos basura.