Por... JOE McDONALD
BEIJING -- El crecimiento industrial de China tuvo un nuevo aletargamiento en julio luego que Beijing decidió contener un auge en el críédito, lo cual fortaleció las versiones de que podría flexibilizar la política monetaria para apuntalar su expansión económica.
En otro aspecto económico, la inflación en China subió en julio su nivel más alto del año debido a que las inundaciones dañaron cultivos, aunque según analistas el aumento en los precios será posiblemente temporal.
Los datos divulgados el miíércoles por el gobierno parecen una nueva señal de que el auge económico de China ha perdido brío y avivaron la sensación de que Beijing necesita dar marcha atrás en los límites al críédito aplicados este año con la intención de evitar una burbuja en los precios de las acciones bursátiles y los bienes raíces.
"Esto nos dice que el crecimiento económico continúa desacelerándose", dijo el economista Zhu Jianfang, de Citic Securities en Beijing. "Si no hacen cambios, la economía estará en peligro de un mayor descenso".
La expansión económica ha pasado de un vigoroso 11,9% en el primer trimestre del año a 10,3% en el segundo, cuando Beijing empezó a retirar los estímulos implementados para salir pronto de la recesión.
Las autoridades chinas dicen que quieren llevar el crecimiento a un nivel más estable, pero la disminución del ritmo fue superior a la que esperaban muchos analistas.
El crecimiento en la producción industrial perdió ímpetu por quinto mes consecutivo hasta ubicarse en 13,4% respecto al año anterior, su menor posición en el año. La ventas al menudeo y las inversiones en fábricas y otros activos fijos tambiíén disminuyeron.
Una caída más acentuada en el crecimiento de China podría tener repercusiones globales si afecta la demanda de equipo industrial europeo y estadounidense, componentes industriales de las economías asiáticas y mineral de hierro y otras materias primas de Australia, Brasil y otras naciones.
El índice de precios al consumidor creció 3,3% en julio respecto al mismo mes del 2009, su ritmo más acelerado este año. El incremento fue impulsado por un salto de 6.8% en los costos de los alimentos.