Lukoil ha creado una nueva filial en España, con sede en Madrid, con el objeto de desarrollar actividades en toda la cadena del negocio petrolífero y tomar posiciones en un mercado que, desde hace al menos dos años, ha despertado el interíés de los grupos energíéticos rusos.
La constitución e inscripción de la nueva sociedad supone el desembarco de la compañía rusa en España para operar en solitario, ya que hasta la fecha limitaba su presencia en el país a una sociedad conjunta para trabajar en el Puerto de Barcelona.
En concreto, Lukoil España se ha constituido con el objeto social de desarrollar toda clase de actividades extractivas, industriales, comerciales, de servicios, corporativas o de promoción referidas al petróleo y el resto de hidrocarburos, en cualquiera de sus estados.
En el sector petrolífero se considera que a Lukoil podrían interesarle especialmente las actividades relacionadas con el refino y las redes de gasolineras, y no tanto las de 'upstream' (exploración y producción), en las que el grupo ya tiene sus necesidades cubiertas en su lugar de origen. A los inversores energíéticos rusos tambiíén se les presupone interíés por actividades de gas.
Antes del verano, Lukoil puso un pie en España al formalizar, a travíés de su filial internacional de 'trading' y ventas Litasco, la creación de una sociedad conjunta con Meroil para, como primer proyecto, ampliar la terminal petrolífera que esta última tiene en el Puerto de Barcelona.
Este primero proyecto tiene una inversión inicial prevista de 50 millones de euros y permitirá a Lukoil tomar posiciones en el área mediterránea. La terminal recibirá suministro de grandes buques y despachará la carga a travíés de los oleoductos de CLH, o por camión, para su venta en España.
Lukoil y Repsol
La entrada de Lukoil como grupo independiente difiere de la que ya intentó a finales de 2008, cuando llegó a negociar la compra a Sacyr del 20% de Repsol en un momento caracterizado por las dificultades de la constructora de mantener su posición en la primera petrolera del país.
El endurecimiento de las condiciones del críédito con el que Sacyr compró el 20% y la necesidad de presentar garantías obligó al grupo presidido a Luis del Rivero a intensificar en diciembre de 2008 las negociaciones con Lukoil, pero la presión de la opinión pública y la decisión del otro principal accionista de Repsol, La Caixa, de desmarcarse de la operación hicieron que la constructora acabase desistiendo.
Aquella negociación no estuvo exenta de controversia política. El vicepresidente ruso, de visita en España, fue el primero en aludir a la misma, al citar en presencia del ministro Miguel Sebastián el interíés de Gazprom, luego Lukoil, de comprar el 20% de Repsol. Tras aquel momento, Sebastián centró su discurso en reivindicar una Repsol "independiente y española".
Gigante petrolero
El último gran movimiento corporativo en torno a Lukoil se produjo a finales de marzo, cuando la petrolera estadounidense ConocoPhillips vendió un 10% de la compañía rusa por 5.000 millones de dólares (3.745 millones de euros).
Lukoil es un gigante petrolero con actividades a escala mundial, con control sobre el 1,1% de todas las reservas mundiales de crudo y del 2,3% de la producción mundial, así como del 19% de la producción rusa de hidrocarburos.
Además, es la tercera mayor petrolera del mundo cotizada y sin presencia estatal y factura al año unos 80.000 millones de dólares (61.500 millones de euros). Su beneficio neto anual ronda los 7.000 millones de dólares (5.380 millones de euros).