NUEVA DELHI (AFP) - El grupo indio Tata Motors anunció este miíércoles la compra de las marcas británicas Jaguar y Land Rover al fabricante de coches estadounidense Ford por 2.300 millones de dólares (1.460 millones de euros), en una transacción que le catapulta al sector de los coches de lujo.
Tata Motors logró "un acuerdo definitivo con la Ford Motor Company para la compra" de Jaguar y Land Rover por "un monto total de 2.300 millones de dólares que será pagado en efectivo", dijo Tata Motors en un comunicado.
"Estamos muy satisfechos por la perspectiva de que Jaguar y Land Rover sean una parte significativa de nuestro negocio automovilístico (...) y buscaremos presevar y profundizar su patrimonio y competitividad, manteniendo sus identidades intactas", dijo el presidente de Tata, Ratan Tata.
Tata Motors, parte de un imperio que abarca desde tíé hasta metalúrgicas, indicó que Ford contribuirá con hasta 600 millones de dólares (380 millones de euros) a los planes de jubilación de Jaguar y Land Rover.
El acuerdo llega en un momento en que Tata busca expandirse más allá de Asia y los analistas se preguntan cómo el grupo indio, que fabrica el modelo 'Nano', el automóvil más barato del mundo, absorberá a las dos marcas de alta gama.
La venta de ambas marcas británicas a Tata fue anunciada inicialmente en Londres por Tony Woodley, líder de United, el mayor sindicato británico, que apoyó la adquisición del grupo indio.
"Hubiíéramos preferido que Ford mantuviera las compañías en su órbita, sobre todo teniendo en cuenta que Land Rover es tan rentable", sostuvo Woodley en un breve comunicado.
"Pero dados los compromisos asumidos por Tata sobre el futuro de Jaguar Land Rover y los acuerdos a largo plazo para abastecerse en motores en Bridgend y Dagenham (plantas de Ford en Gran Bretaña), naturalmente estamos satisfechos de que (la empresa estadounidense) se mantenga implicada" en la producción de esas marcas, añadió.
La adquisición, liderada por el presidente del grupo indio, Ratan Tata, tiene lugar en un contexto de desaceleración económica en los países industrializados que ha afectado la demanda de coches de lujo.
En enero, Tata presentó su modelo 'Nano', que se venderá en India a 2.500 dólares (1.600 euros), con la esperanza de que el sencillo coche pueda revolucionar la manera de transportarse de millones de personas.
La compra de Jaguar y Land Rover, no obstante, coloca a Tata en la inusual posición de fabricar el coche más barato del mundo así como algunos de los más caros.
La crisis financiera y crediticia mundial ha mermado las ventas de coches caros en los últimos tiempos. Las ventas de Jaguar en Estados Unidos y Europa cayeron un 30% anual en los dos primeros meses de 2008.
"Ambas marcas ya experimentan ventas en declive", dijo Aniket Mhatre, analista del sector automovilístico de la casa de corretaje Prabhudas Lilladher, basada en Bombay.
"Estados Unidos atraviesa una desaceleración, así que las ventas (de vehículos de lujo) no serán tan buenas", añadió.
Tata controla actualmente más de la mitad del mercado de camiones de India y casi un 20% de su mercado de coches de pasajeros.
Tata Motors, parte del gigantesco Grupo Tata cuyo imperio abarca desde metalúrgicas hasta tíé, desea realizar un importante salto tecnológico al acceder a los sofisticados motores de Land Rover y Jaguar.
El fabricante estadounidense Ford, que se haya en dificultades tras haber perdido unos 15.000 millones de dólares en los dos últimos años, anunció el año pasado que ponía a la venta a las dos marcas como parte de una reestructuración.
Pero algunos analistas han expresado la preocupación de que Tata está absorbiendo demasiada deuda y responsabilidad en los planes de jubilación, y creen que podría tener problemas en absorber a las dos marcas de lujo en su línea de vehículos convencionales