Caixanova ha puesto a la venta el Banco Gallego, donde tiene una participación del 49%, dentro del plan de venta de activos que contempla su fusión con Caixa Galicia. Según distintas entidades que han recibido la oferta de venta, la valoración inicial del banco es de unos 300 millones de euros, cifra que consideran exagerada los potenciales interesados.
Según las fuentes, Goldman Sachs -que tiene el mandato de venta de todos los activos de la entidad fusionada, como adelantó El Confidencial- está ofreciendo el Banco Gallego a distintas entidades nacionales y extranjeras a las que esta compra permitiría accedera áreas geográficas o a segmentos de negocio donde no tienen presencia actualmente.
La venta del Gallego ya se puso en marcha antes de que se acordara la fusión de las cajas gallegas. Según una fuente, hubo ofertas de una entidad española y de otra portuguesa, pero no se llegó a un acuerdo por culpa del precio.
Un portavoz de Caixanova se remite a unas recientes declaraciones del director general de la fusión, Josíé Luis Pego, en las que aseguró que se se está haciendo una prospección de mercado para ver quíé activos se pueden colocar pero que todavía no hay nada formalmente en venta.
Valoración basada en el Guipuzcoano
Banco Gallego cuenta con una red de 203 oficinas (al cierre de 2009), con una clara concentración en su comunidad de origen, donde se sitúan 135 de estas sucursales, seguida por Madrid, con otras 31. Su negocio combina banca minorista y privada -gestión de patrimonios-, con unos activos totales de 4.300 millones de euros, de los que 3.500 son críéditos.
La valoración de 300 millones toma como referencia la reciente compra del Guipuzcoano por parte del Sabadell, que pagó 750 millones por una entidad con 10.000 millones de activo. Haciendo una sencilla regla de tres se obtiene un valor de unos 320 millones para Banco Gallego, la mitad de los cuales serían los ingresos que obtendría Caixanova por la venta de su participación.
Sin embargo, una de las fuentes consultadas explica que ambas entidades no son comparables porque "el banco vasco fue mucho más prudente en los años del boom del críédito y no tiene tantos activos problemáticos como el gallego; por eso, a la valoración que pide Caixanova hay que restarle el saneamiento de balance que es necesario".
Es muy difícil alcanzar un acuerdo
"Cerrar la operación es muy complicado porque los interesados saben que las cajas tienen que vender a la fuerza y pretenden comprar a precio de ganga, pero las cajas tienen que conseguir plusvalías con esta venta; por tanto, si no obtienen un precio suficiente, seguirán esperando", señala una persona conocedora de la operación.
Caixanova posee el 49,84% del capital de Banco Gallego y controla la gestión. Tambiíén están presentes en su accionariado la familia Entrecanales, a travíés de Juan Manuel Urgoiti, con un 7,27%, BNP Paribas con un 3,91%, Inditex con un 3,08% y varios empresarios gallegos que suman el 24,4% restante.
