Ya a principios de este año, la economía de Seychelles demostró que se había recuperado de la recesión del año pasado a travíés de difíciles programas de reforma. Ahora, nuevas cifras indican un boom en el país del Ocíéano índico.
2008 y 2009 fueron años difíciles para Seychelles, donde una crisis de carácter nacional se añadió a los fuertes efectos de la crisis financiera mundial. De hecho, 2008 se saldó con un crecimiento negativo del PIB y el gobierno se vio obligado a renegociar su deuda externa. El presidente James Michel anunció difíciles reformas y grandes recortes en el gasto público.
En 2009, las reformas ya iniciadas comenzaron a notarse. El Fondo Monetario Internacional (FMI) predijo originalmente un año catastrófico para la economía de Seychelles, con una disminución del PIB de casi un 8 por ciento. De hecho, las últimas cifras del FMI muestran que Seychelles registraron un crecimiento de en torno a cero el año pasado.
En mayo de este año, una delegación del FMI que se desplazó a Seychelles para reunirse con el presidente Michel y otros altos cargos, se mostró sorprendida por los rápidos resultados de las reformas estructurales en el país. El PIB real se prevíé que crezca un 4 por ciento en 2010 "reflejando principalmente un repunte en los ingresos del turismo", concluyó la misión del FMI.
Durante las últimas dos semanas, otra misión del FMI ha visitado la capital de Seychelles, Victoria. Una vez más, el líder de la delegación, Jean Le Dem, se mostró sorprendido por la rápida recuperación de la economía nacional.
El FMI, despuíés de estudiar los hechos y las cifras presentadas por el gobierno de Seychelles, tuvo que ajustar su proyección de crecimiento para 2010, aún más al alza. "Está previsto que el crecimiento económico supere el 6 por ciento en 2010", anunció ayer, en Victoria, Jean Le Dem.
En un país relativamente rico, cuyo crecimiento de la población tiene un promedio de menos del 2 por ciento anual, un crecimiento del PIB de más del 6 por ciento sólo puede ser descrito como un auge económico. Además, el FMI registra que la inflación en Seychelles es cercana a cero, lo que significa que el crecimiento va a crear riqueza para las empresas y los ciudadanos de Seychelles.
Sorprendido por los rápidos cambios experimentados en la economía de Seychelles, el FMI sigue mostrándose conservador en sus proyecciones a largo plazo para el crecimiento económico en el archipiíélago. "Las perspectivas para 2011 son favorables. A pesar de la frágil recuperación mundial, la industria del turismo, y las alentadoras perspectivas para las exportaciones de atún sugieren que el crecimiento podría ser de alrededor de un 4,3 por ciento", predice cuidadosamente Le Dem.
Al contrario que la mayoría de otros países, los analistas del FMI no han hecho proyecciones a largo plazo para el crecimiento económico en Seychelles. Su pronóstico más reciente, realizado en junio, prevíé que unas tasas de crecimiento del PIB de alrededor del 5 por ciento en 2011 y 2012.
Según Le Dem, el sorprendente crecimiento en Seychelles este año se presenta como una consecuencia de "un repunte en el turismo, una importante inversión extranjera directa, y una amplia recuperación de la economía nacional". Además, el "gran progreso" en la aplicación de las reformas económicas ha creado la base para este repentino crecimiento.
Las autoridades de Seychelles están obligadas a continuar en su camino de consolidar las nuevas y exitosas políticas. Una completa modernización del sistema fiscal, incluyendo la introducción de un IVA, se va implantar en breve. Mientras tanto, la industria del turismo se apoya en sus fuertes esfuerzos expansivos para abrirse a nuevos mercados y atraer a los inversores.
Las conservadoras proyecciones del FMI para el crecimiento en Seychelles en 2011 y 2012, por lo tanto, quizás deben ser revisadas en breve a medida que la economía del país sigue sorprendiendo a los analistas.