Los planes de contención de costes, desinversiones, mejora de la eficiencia y crecimiento orgánico en los que se han embarcado las compañías elíéctricas desde el inicio de la crisis para digerir la reordenación del sector de los años anteriores han permitido a estas empresas recortar un 2% su deuda en los nueve primeros meses del año.
En concreto, las elíéctricas acumulan en la actualidad un pasivo de 66.022 millones, frente a los 67.357 millones a cierre de 2009. De esta deuda, 17.869 millones corresponden a Endesa, 25.677 millones a Iberdrola, 19.834 millones a Gas Natural Fenosa y 2.642 millones a HC. Las elíéctricas se encuentran además pendientes del proceso de colocación en los mercados del díéficit de tarifa del sector elíéctrico, que les permitirá sacar de su balance los 12.484 millones de este desajuste que financian directamente.
Esta cifra equivale a un 20% de la deuda total y preocupa especialmente a los directivos de las empresas, que temen que esta carga afecte a su calidad crediticia y, con ello, les dificulte la captación de recursos para financiar las inversiones. Las empresas que más parte del díéficit deben financiar son Endesa, con 5.681 millones, e Iberdrola, con 4.421 millones, mientras que a Gas Natural Fenosa le corresponden 1.662 millones y a HC, otros 720 millones.
Menos beneficio
Por otro lado, las elíéctricas ganaron en los nueve primeros meses del año 5.986 millones de euros, un 2,7% menos, y podrían cerrar el segundo ejercicio consecutivo con descensos en las ganancias. En 2009, el beneficio se redujo un 22%, despuíés de los incrementos del 86% y del 14,2% en 2008 y 2007, respectivamente.
Endesa, pese a haber recortado en un 10% esta partida, sigue siendo la que más dinero gana, con 2.722 millones, por delante de Iberdrola, que obtuvo 2.069 millones, y de Gas Natural Fenosa, con 1.117 millones. HC, con 78 millones, ha sufrido la mayor caída en el beneficio, del 59%. Pese a la hegemonía de Endesa en el ritmo de ganancias, la empresa reconoce que, con las desinversiones realizadas en negocios como el de las renovables, relacionadas en buena parte con el proceso de adquisición de la empresa, ha sufrido un cambio de perímetro.
Gas Natural Fenosa tambiíén se encuentra adaptándose a un nuevo perímetro que, a diferencia del de Endesa, se engrosó significativamente con la compra de Unión Fenosa. Como dificultad añadida, la empresa intenta mitigar los efectos negativos del laudo arbitral que da la razón a Sonatrach en el conflicto del gas.
Mejora en Ebitda y previsiones
La caída en los beneficios de las elíéctricas no viene acompañada de un deterioro en su beneficio bruto de explotación (Ebitda), que mide la actividad ordinaria del negocio y que hasta septiembre se situó en 14.697 millones, un 9,4% más. Por otro lado, el encarecimiento de la electricidad en los últimos meses del año y la consolidación en la recuperación de la demanda, que sube hasta la fecha un 3,3%, hace prever a las elíéctricas un mejor resultado en el cuarto trimestre.