Aunque las burbujas financieras no se conocen hasta que estallan, si están creciendo cada vez más las alarmas entorno a una serie de sectores y valores en los que se están cometiendo excesos. Los mercados llevan recibiendo cantidades ingentes de liquidez desde que comenzó la crisis financiera en 2007 como consecuencia del estallido precisamente de una burbuja, la de las hipotecas subprime.
Desde algunos sectores se culpa a la política monetaria de Alan Greenspan, que mantuvo los tipos de interíés en mínimos, al 1%, entre septiembre de 2001 y junio de 2003 tras el pinchazo de las puntocom, de la situación actual. Pero lo cierto es que desde diciembre de 2008, la Reserva Federal de Estados Unidos, bajo la batuta de Ben Bernanke, mantiene el precio del dinero tíécnicamente en el 0% y su última inyección de liquidez al mercado llegó la semana pasada en forma de compra de activos por 600.000 millones de dólares.
En este sentido los inversores buscan desentrañar cuál será la próxima burbuja que estalle y son varios los candidatos a protagonizar la próxima crisis. Daily Finance ha elaborado una lista con las burbujas que van a estallar pronto y entre ellas se encuentra el oro.
Esta semana el metal dorado ha superado por primera vez en su historia los 1.400 dólares la onza, alcanzando máximos por encima de los 1.417 dólares. Desde 1998, cuando se encontraba en 294 dólares hasta hoy su precio se ha disparado un 377%.
Los inversores buscan en el metal precioso protección frente a la inestabilidad de los mercados, especialmente tras el estallido de la crisis de la deuda que en las últimas semanas ha vuelto a latir con fuerza por el miedo a la posibilidad de impago de países como Irlanda, que ha salpicado a otros perifíéricos europeos. Sin embargo, la proliferación en los últimos años de tiendas y anuncios de compra de oro y joyas puede ser un buen indicativo de que nos encontramos ante el comienzo de una burbuja.