Los ayuntamientos españoles tardan una media de 10 meses en pagar a las empresas que prestan servicios de saneamiento urbano, diez veces más que el plazo de 30 días fijado por la nueva Ley de Morosidad para las administraciones públicas, aunque el de Madrid podría llegar a retrasar los pagos 15 meses.
El presidente de la Asociación de Empresas de Limpieza Pública (ASELIP), Francisco Jardón, explicó a Efe que el sector se encuentra "en una situación muy negra", ya que la morosidad de los municipios españoles se ha duplicado en el último año a causa de la crisis.
Según Jardón, la caída de los ingresos extraordinarios que los ayuntamientos habían percibido gracias al "boom" inmobiliario ha dejado "sin liquidez" a las arcas municipales, lo que supone "un grave problema" para las empresas de limpieza pública.
A su juicio, el aumento de la morosidad de los ayuntamientos, que tradicionalmente había sido "un cáncer" para este sector, ha hecho que las empresas se encuentren "en una situación insostenible".
Añadió que la nueva Ley de Morosidad contiene "buenas medidas" que podrían solucionar este problema, pero son "muy difíciles de aplicar", sobre todo "a causa de los propios políticos" y a que los ayuntamientos "ya no tienen fondos".
Los municipios andaluces tardan más
Las empresas que forman parte de ASELIP, entre ellas filiales de grupos constructores como FCC, ACS, Ferrovial o Sacyr, dan servicio a 6.500 ayuntamientos en todo el país y facturan 3.700 millones de euros al año, de los que un 83,7% (cerca de 3.100 millones) se cobran con retraso. Estas empresas emplean a 110.000 personas.
Por comunidades autónomas, Jardón apuntó que los ayuntamientos andaluces son de los que más tardan en pagar de toda España, con una morosidad media de 18 meses, que en el caso de Jaíén asciende a cinco años, mientras que la deuda asciende en ciudades como Jerez de la Frontera a 100 millones de euros.
Tambiíén señaló que la morosidad media de los ayuntamientos del Levante ronda los 12 meses, al tiempo que subrayó que el caso "más grave" corresponde a Madrid.
Barcelona tardaría solo 30 días
El presidente de ASELIP indicó que el Ayuntamiento de Madrid había sido históricamente "un buen pagador", con una morosidad de entre 6 y 7 meses, pero que íésta corre el riesgo de duplicarse a causa de la crisis, con lo que el plazo de pago podría ascender a cerca de 15 meses.
Asimismo, resaltó que el consistorio matritense, que genera 560 millones de la facturación anual de las empresas de limpieza, ha retrasado un año los pagos correspondientes a 2010.
Por el contrario, Jardón puso como ejemplo al País Vasco y a Navarra, las autonomías donde los ayuntamientos cumplen mejor con los plazos de pago, así como a Barcelona, cuyo Ayuntamiento paga dentro del plazo legal de 30 días "de una forma heroica".
Además, destacó que los retrasos en los pagos de los ayuntamientos a las empresas de limpieza puede repercutir en la morosidad de estas últimas respecto a sus proveedores, a los que están obligados a pagar en el plazo de 60 días.
Tambiíén subrayó que las medidas de los ayuntamientos para recortar costes, que incluyen revisiones a la baja de hasta un 20% de los contratos de saneamiento, podrían dar pie a un aumento de los despidos en el sector, aunque por el momento solamente se ha reducido el número de puestos de trabajo temporales.