Gómez negocia contrarreloj la reforma de las pensiones
El compromiso del Ejecutivo con los socios europeos y con los mercados de actuar y de hacerlo con rapidez es firme. El presidente Zapatero ha dado de plazo al ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, hasta el 28 de enero para que logre un acuerdo de reforma del sistema de pensiones.
Ante Gómez, el reloj, negociaciones en diciembre con los distintos grupos parlamentarios en el marco del Pacto de Toledo, negociaciones con empresarios y sindicatos en enero y tres medidas claras cuyo objetivo, según el ministro, es seguir teniendo un sistema público de pensiones sólido y saneado dentro de 15 o 20 años.
En una entrevista con Valeriano Gómez, que publica hoy El País, el titular de Trabajo e Inmigración asegura que en 2050 habrá prácticamente 17 millones de pensiones, frente a los menos de 9 actuales, lo cual haría inviable el sistema de cobertura a no ser que se acometan reformas.
Esas reformas se concretarían principalmente en tres: "Aumentar el periodo de cómputo de la pensión, ahora en 15 años; dificultar las jubilaciones parciales y desplazar la edad legal de jubilación", según Gómez.
El desplazamiento del que habla el ministro supone que el Ejecutivo está pensando en fijar en 67 años, en lugar de en los 65 actuales, la edad legal de jubilación, aunque admite que "los detalles están abiertos" al diálogo y que buscan "consenso con los grupos parlamentarios". Al mismo tiempo asegura que la medida contemplaría excepciones y que la flexibilidad de la misma sería necesaria.
Para Valeriano Gómez, el aumento de la esperanza de vida, el no excesivo aumento de la tasa de natalidad y el hecho de que la inmigración no sería realmente la solución que sostuviera las pensiones, hace preciso que se actúe ya mismo.
El actual sistema "solo se podría sostener con un aumento muy significativo de la población, perspectiva que no aparece en ninguna de las previsiones".