La cantante asegura que le encantaría volver a representar a España en Eurovisión tras su paso por el festival en 2002.Muchos representantes en Eurovisión deciden regresar al festival años después para intentar repetir el resultado anterior o incluso superarse. En los últimos años hemos visto volver a Sergey Lazarev (Rusia 2019 y Rusia 2016) y a Alexander Rybak (Noruega 2018 y Noruega 2009). En España el mayor ejemplo lo tenemos en Ruth Lorenzo que ha manifestado en numerosas ocasiones la intención de volver a Eurovisión tras representarnos en 2014.Ahora, otra que ha manifestado que no le importaría volver a representarnos en Eurovisión es Rosa López. La granadina siempre se ha mostrado cauta por miedo a no superar el puesto 7 que cosechó en Eurovisión 2002 con su «Europe’s living a celebration’.Pero ahora parece que ese miedo ha desaparecido. La ganadora de la primera edición de ‘Operación Triunfo’ ha concedido una entrevista al programa ‘Te la vas a ganar’ en Europa FM en la que se muestra con ganas de volver al festival.«Si tengo un tema con el que me siento cómoda y puede ser la bomba en mi carrera, no me importaría. Me encantaría porque es un festival que viene muy bien en tu carrera, es un subidón a nivel personal y profesional«, comentaba la cantante, que acaba de lanzar su nuevo LP «Rarezas».
Rosa López se hizo conocida gracias a la primera edición de Operación Triunfo en 2001, en la que participó y resultó ser ganadora. Desde entonces, la cantante consiguió llevar una vida más saludable y con el paso del tiempo logró bajar unos cuantos kilos.Desde hace años López vive volcada en el deporte, baila salsa, practica cardio y cumple metódicamente con sus tablas de ejercicios. El hecho de tener una mayor actvidad le ha permitido cambiar su figura radicalmente. La granadina ha publicado en su cuenta de Instagram unas imágenes en las que deja ver sus nuevas medidas.Rosa, a pesar de que se encuentra inmersa en sus nuevos proyectos profesionales, concretamente en la promoción de «Caradura», la nueva versión de uno de los temas musicales que lanzó nada más salir del concurso, también consigue sacar tiempo para disfrutar de sus días de descanso y lucir tipazo en bikini.La cantante Rosa LópezLa cantante Rosa López - InstagramPara disfrutar de sus vacaciones, la cantante ha hecho un hueco en su agenda y ha grabado un vídeo en el que aparece luciendo un bikini rojo muy favorecedor y una forma física muy diferente a la que presentaba cuando dio su salto a la fama en el año 2001.La artista está tan involucrada en llevar una vida sana que ella misma se encarga de fomentar una rutina de hábitos saludables a través de sus redes sociales. En cuanto a su alimentación, Rosa sigue una dieta vegana, se alimenta a base de vegetales y no consume alimentos de procedencia animal.
Ven a cenar conmigo gourmet edition ha sido todo un éxito en la pequeña pantalla durante este verano. Cinco son los famosos que compiten por alzarse con el premio final en esta nueva edición, algo que pasa en un segundo plano dado que el reality show proporciona semana a semana 'momentazos' que son difíciles de olvidar. La casa de Raquel Mosquera ha sido el primer escenario de la primera entrega de esta séptima temporada del concurso, un ambiente distendido en el que sus invitados han podido explayarse con total libertad. Rosa López ha sido una de las comensales que más ha dado de qué hablar y es que desde que hizo su aparición estelar, su condición de vegetariana se convirtió en uno de los temas de conversación en la mesa. Asunto que no fue el único que sacó a pasear la que fuera ganadora de OT1.El amor parece ser la asignatura pendiente de la eurovisiva, que reconoce que ser famosa no la ha beneficiado en absoluto en lo que respecta a su situación sentimental. "Es preferible estarse quieta si te importa tu vida. Mejor tener amistades y tener experiencias, porque a saber si te pueden pegar una enfermedad", decía la cantante cuando se le preguntaba por sus experiencias íntimas. Palabras que pronto perdieron sentido cuando la viuda de Pedro Carrasco la invitaba a conocer a un hombre de procedencia africana, ya que ella confesaba tener muy buena experiencia en el asunto. "Yo necesito contacto físico y que me empotre contra la pared", confesaba Rosa ante la atenta mirada de sus compañeros.Siempre discreta en lo que se refiere a su vida privada, la cantante no está cerrada del todo a encontrar una persona especial. Tarea en la que Raquel Mosquera está dispuesta a ayudarla. "Móstoles, Fuenlabrada y África son lugares donde me quieren mucho", decía la peluquera cuando explicaba su afición por visitar locales frecuentados por africanos, ya que fue allí donde encontró a su pareja actual, Isi. "Si salimos juntas por ahí, te prometo que alguno cae", le decía la viuda de Pedro Carrasco a Rosa de España. Ofrecimiento que, quién sabe, podría ser una gran oportunidad para la granadina.
El paso de Rosa López por el concurso Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition no está siendo lo que ella se imaginaba y no porque no se lleve bien con sus cuatro compañeros, Raquel Mosquera, Francisco, Aless Gibaja y Laura Matamoros, sino porque está teniendo problemas para llenarse el estómago y poder calificar sus habilidades como cocineros.Si en el primer programa era normal que la primera anfitriona, Mosquera, no supiera que Rosa era vegana, por lo que no pudo comer, era de esperar que el resto de sus compañeros intentasen adaptar sus platos para que la cantante pudiera probar bocado.Este martes ha sido el turno del cantante Francisco y parece que se olvidó por completo de los gustos de su invitada. Los problemas comenzaron cuando la de Operación Triunfo llegó a la casa del artista y vio lo que había en el menú: calamares con brandy y cebolla pochada y merluza fresca sobre una cama de patatas pochadas y cubierta con cebolla caramelizada.Y si bien el de Como amar a una mujer intentó salir del paso improvisando una ensalada de lechuga y tomate, Rosa no se sintió muy cómoda. "Quiero ser sincera, y más a estas alturas del programa. La sensación que tengo es que puedo empatizar con el resto, pero ellos conmigo no", dijo a las cámaras."A Rosa no le gusta nada", dijo en cierto momento el anfitrión a lo que esta, ya visiblemente enfadada, reconoció que le "jodía mucho que opinen sobre mi filosofía de vida y además sin tener la mente abierta" y es que ninguno de los platos estaban "pensados para una vegana".A pesar de todo, al final la cena fue más o menos agradable y los dos estuvieron charlando sobre lo que sí les une, la música que volvió a demostrar que puede 'amansar a las fieras'.
Rosa está muy ilusionada con un proyecto que lleva tiempo preparando, y donde quiere demostrar todo su arte. "Me estoy preparando muy a fondo, no solo a nivel vocal, también físicamente. El estreno está previsto que sea para este Otoño, el lugar todavía está por cerrar, va a ser un homenaje a Latinoamérica, donde quiero regresar. Estoy versionando muchos temas, casi todo el repertorio. La verdad es que no paro, estoy volcada con mi trabajo y también he compuesto dos temas que van a salir también en Otoño, y estoy muy emocionada. He procurado sacar tiempo también para ver a mis amigos, y familia". De esta manera lo explicó.La cantante también ha hecho sus pinitos en el cine de la mano de Santiago Segura. "Ha sido una experiencia estupenda, tan solo ha sido un cameo en su última película, la de Padre no hay más que uno.De amores prefirió no hablar, parece ser que su corazón está libre y de momento prefiere que siga así, ya que por ahora la artista lo que de verdad le preocupa es que su espectáculo tenga un gran éxito, y pueda llevarlo a muchas ciudades de España, y donde surja fuera de nuestras fronteras
En los últimos dos años, Rosa López ha confesado en algunas de sus apariciones televisivas algunos de los episodios más oscuros que tuvo que vivir al comienzo de su carrera tras ganar la primera edición de Operación Triunfo.Con Risto Mejide confesó que había dado "too much information" cuando desveló la culpa de que hubiera perdido la voz: "Tenía una gira tremenda y mi voz estaba preparada, pero hubo un día que, yo no sé por qué, una chavala [miembro de su equipo] no paraba de preguntarme si estaba bien. Ella tenía miedo a que fallara y se empeñó en que yo estaba mal y que, por cojones, quería traer a un médico. Yo me acojoné cuando el tío abre el maletín y me doy cuenta que rueda un bote colorcillo azul y blanco. No sé qué coño era eso. No sé qué me pincharon en el culo".La solista granadina, que acaba de lanzar Rarezas, volvió a hablar sobre el asunto tras las preguntas de la presentadora Toñi Moreno en Telemadrid y sus palabras no tienen desperdicio: "Tras aquello tuve un quiste, que se provocó por el esfuerzo que hice en tres días. En el primer concierto me fue bien, el siguiente también, pero en el tercero durante la sexta canción no es que no pudiera cantar, es que me asfixiaba. A raíz de eso te quitan la voz y desapareces".Geno, su compañera de edición, apuntilló el momento con su opinión personal: "Hicieron una auténtica barbaridad con esta señora. Cantar en unas tonalidades que no le corresponden. Europe's living a celebration ya tenía unas tonalidades que no eran para ella".Rosa López también dejó en el aire que tenía muchas dudas con algunos gestores que aparecieron en su carrera: "Yo hasta los 6 años de mi carrera no he enterado nunca de si tenía cuenta o no tenía cuenta. Todo el mundo quiere dinero pero al final los que salen escaldados son los que no saben".No fue su única queja a nivel monetario. Las cuatro invitadas confesaron que generaron mucho dinero pero que no se hicieron millonarias: "Éramos muy jóvenes y no mirábamos lo que se llevaba la productora, ni las agencias de publicidad y compañías". El malestar llegó a su culmen cuando empezaron a pedir la carta de libertad. Fue Gisela la que desveló las razones: "Llegaban trabajos y preguntaban por mí, pero como yo [en ese momento] ya tenía trabajo no me los comunicaban. Me enteré a posteriori y fue entonces cuando decidí pedir la carta de libertad".
Rosa López saltó a la fama tras coronarse como ganadora de la primera edición de «Operación Triunfo» y convertirse en la representante de España en «Eurovisión». Desde entonces, su vida dio un giro de 180 grados, pero no solo a nivel profesional. La andaluza empezó a llevar un estilo de vida más saludable y perdió mucho peso. Deporte, bailes, cardio y estrictas tablas de ejercicios son ahora una rutina imprescindibles en su vida, una disciplina que le ha permitido cambiar radicalmente su figura e incluso llegó a ser imagen de una conocida marca de productos adelgazantes.InstagramInstagramLa artista comparte gran parte de su vida privada a través de las redes sociales, y si este verano triunfaba con sus posados más atrevidos en bikini, las últimas instantáneas de la artista con motivo del lanzamiento de su nuevo disco, «Vacío», que verá la luz el 25 de octubre no han dejado indiferente a nadie.«Cuantas veces he imaginado la canción perfecta, el estilo perfecto, la melodía más grande (...) entre un pensamiento y otro existe un vacío, ahí es donde verdaderamente eres tú, donde está tu ser más vulnerable y verdadero», escribe junto a la imagen, que ha dejado a sus fans sin palabras por su radical cambio de «look». Con una larga melena y una chaqueta con la que presume de figura, la vocalista se ha ganado los piropos de muchos de sus seguidores.«Cuánta personalidad en una sola foto», «Explosiva total», «Guapa por dentro y por fuera» o «Te veo brillar, madurar y con un conocimiento espectacular. Te deseo la mayor de las suertes porque te lo mereces», son solo algunos de los bonitos mensajes que ha recibido como respuesta.
Han pasado 20 años desde que Rosa López se diese a conocer en Operación Triunfo. Dos décadas en las que la fama ha estado más y menos presente en su vida pero en las que siempre ha luchado por su trabajo como cantante. Ahora la ex triunfita cumple 39 años reinventada y preparando su próxima gira.
Rosa López saltó a la fama tras coronarse como ganadora de la primera edición de «Operación Triunfo» y convertirse en la representante de España en «Eurovisión». Desde entonces, su vida dio un giro de 180 grados, pero no solo a nivel profesional. La andaluza empezó a llevar un estilo de vida más saludable y perdió mucho peso. Deporte, bailes, cardio y estrictas tablas de ejercicios son ahora una rutina imprescindibles en su vida, una disciplina que le ha permitido cambiar radicalmente su figura e incluso llegó a ser imagen de una conocida marca de productos adelgazantes.Ahora, la artista está inmersa en un nuevo lanzamiento, el single «Solo tu sonrisa», cuyos beneficios irán destinados íntegramente a la Cruz Roja para ayudar a quienes más lo necesiten durante esta crisis del Covid-19. En esas estaba, realizando un directo de Instagram junto a la revista «Semana», cuando ha desvelado, casi sin quererlo, que su corazón vuelve a estar ocupado.Cuando se le ha preguntado por la cancelación de la boda de Chenoa, a la que estaba deseando asistir, hacerse con el ramo de la novia e incluso conocer a algún chico, tal y como dejó caer en alguna ocasión, respondía inesperadamente: «Ya no hay ramo que valga».Y, aunque siendo muy celosa de su vida personal, contaba emocionada que esta cuarentena le ha traído algo muy bueno de forma completamente inesperada: «He conocido a una persona, quién me iba a decir que esta situación me traería esto». Y añadía, en conversación con la citada revista: «Estoy súper feliz, ojalá vaya todo genial. Yo creo que es el amor de mi vida, con eso te lo digo todo. No ha hecho falta el ramo de Chenoa».Un poco avergonzada por lo precipitado de su confesión, explicaba que no tenía pensado hablar de ello en estos momentos, por mantener su vida privada al margen, pero que en cualquier caso está «viviéndolo y disfrutándolo muchísimo». Y zanjaba la cuestión con estas palabras sobre su nueva pareja: «Es un hombre normal, buena persona y maravilloso».
Rosa López ha vuelto a retomar su carrera profesional tras el parón obligado por la pandemia de coronavirus.Hace unos días, la artista explicaba a través de su perfil de Instagram lo que había sentido al volver a subirse a un escenario de nuevo: "Ayer durante el viaje camino a tierras gallegas y junto a mi equipo @gaakcomunicacion sentíamos mucha emoción y nervios inexplicables. Aún ahora a la vuelta. volver a pisar el escenario, con un público más chiquitito q de costumbre pero entregado desde el corazón... que bonito es sentiros cerca y a distancia".Y esta es solo la primera toma de contacto con todos los nuevos proyectos que está preparando, aunque confiesa que "todavía no puede desvelar nada, pero lo está deseando".Y entre toda esta mezcla de sensaciones, Rosa ha querido transmitir un potente mensaje a sus seguidores. A raíz de las fiestas del Orgullo, que este año han quedado relegadas al ámbito online, a artista ha publicado un selfie en el que aparece vestida con un ajustado body marrón y luciendo una gran sonrisa. "Y ahora me pedirán justificar esta foto", empieza escribiendo en lo que es un llamamiento a la libertad para ser más felices."Pero yo prefiero que te quedes esta sonrisa de felicidad por saber que vamos más suaves y amorosos con la vida. Con ganas de dar y de hacerlo con el corazón. ¿Os dais cuenta del amor que emerge en todos estos meses? La claridad inconsciente y consciente q vamos consiguiendo entre todos. Hoy me apetece liberarme de mas lastres, de unirme al respeto ✊🏻 dignidad y valores 🏳️🌈 esta bandera es lo q representa para mi. Por Cierto ... CALOR?! noooo ... ", concluye con varios hashtags que se utilizaron para el Día del Orgullo.La publicación supera los 18.000 'me gusta' y acumula cientos de menajes dándole las gracias a la cantante por este mensaje tan inspirador.
Rosa López, muy concienciada con el movimiento «body positive», que anima a las personas a sentirse a gusto con su cuerpo y a abrazar la naturalidad, ha compartido con sus más de 200.000 seguidores de Instagram un posado postvacacional acompañado por un reivindicativo mensaje en el que aboga por eliminar los remordimientos que generalmente aparecen tras haber ganado unos kilitos.«Me vuelvo con unos kilitos de mas y con estrés de menos. Qué bien sienta pasarse por casa eh! gracias a Dios todos y todo bien dentro de tanta historia. A seguir caminando con fuerza y con mucha resiliencia. Os quiero. Venga que seguimos eh?!! besazo!! #Granada #Familia #VuelvoConActitud #UnosKilosDeMasSinRemordimientos», escribe junto a varias instantáneas tomadas durante sus días de vacaciones en su tierra.Este tipo de mensajes positivos son ya habituales en las redes sociales de la artista, que el pasado mes de junio presumía de tipazo en bañador, y escribía: «Y ahora me pedirán justificar esta foto». Ella, adelantándose a las críticas, apelaba a la complicada situación que se vive como consecuencia de la pandemia. «Yo prefiero que te quedes esta sonrisa de felicidad por saber que vamos mas suaves y amorosos con la vida. Con ganas de dar y de hacerlo con el corazón. ¿Os dais cuenta del amor que emerge en todos estos meses? La claridad inconsciente y consciente que vamos consiguiendo entre todos».Amor en confinamientoDurante todo el confinamiento, Rosa López fue muy activa en las redes sociales e incluso confesó a la revista «Semana» haber encontrado el amor a pesar de las circunstancias excepcionales: «He conocido a una persona, quién me iba a decir que esta situación me traería esto». Y añadía, en conversación con la citada revista: «Estoy súper feliz, ojalá vaya todo genial. Yo creo que es el amor de mi vida, con eso te lo digo todo». Un poco avergonzada entonces por lo precipitado de su confesión, explicaba que no tenía pensado hablar de ello en estos momentos, por mantener su vida privada al margen, pero que en cualquier caso está «viviéndolo y disfrutándolo muchísimo». Y zanjaba la cuestión con estas palabras sobre su nueva pareja: «Es un hombre normal, buena persona y maravilloso».
Esta semana han salido a la luz las primeras imágenes de Rosa López junto a su nueva pareja, a quien conoció durante un concierto de Marta Sánchez y de quien terminó de enamorarse en pleno confinamiento. A pesar de su habitual perfil bajo, sobre todo en lo que respecta a su vida privada, la artista no pudo evitar que en una entrevista se le escapara que, tras tres años, ha vuelto a encontrar el amor.La artista, que sigue con ilusión la promoción de nuevos trabajos, como el single «Solo tu sonrisa», cuyos beneficios irán destinados íntegramente a la Cruz Roja para ayudar a quienes más lo necesiten durante esta crisis del Covid-19, ya presume de noviazgo a pesar de los flashes de las cámaras.En una entrevista para la revista «Semana», cuando se le preguntó por la cancelación de la boda de Chenoa, a la que estaba deseando asistir, hacerse con el ramo de la novia e incluso conocer a algún chico, tal y como dejó caer en alguna ocasión, respondía inesperadamente: «Ya no hay ramo que valga».Y, aunque siendo muy celosa de su vida personal, contaba emocionada que esta cuarentena le ha traído algo muy bueno de forma completamente inesperada: «He conocido a una persona, quién me iba a decir que esta situación me traería esto». Y añadía, en conversación con la citada revista. «Estoy súper feliz, ojalá vaya todo genial. Yo creo que es el amor de mi vida, con eso te lo digo todo. No ha hecho falta el ramo de Chenoa», bromeaba.Un poco avergonzada por lo precipitado de su confesión, explicaba que no tenía pensado hablar de ello en estos momentos, por mantener su vida privada al margen, pero que en cualquier caso está «viviéndolo y disfrutándolo muchísimo». Y zanjaba la cuestión con estas palabras sobre su nueva pareja: «Es un hombre normal, buena persona y maravilloso».Ahora, la pareja ha protagonizado la última portada de la revista «Pronto», que ha cazado a Rosa y a su chico dando un paseo por las calles de Madrid durante el que compartieron besos, miradas cómplices y abrazos. Eso sí, sin deshacerse de la mascarilla.
hora que cumple 40 años, no parece que Rosa López vaya a adentrarse en la crisis que, dice la superstición extendida, afecta a la mayoría de los adultos cuando cruzan ese Rubicón de la edad. Quizá porque ya viene curtida de otros sinsabores pasados, que le han amargado la vida en porciones nada desdeñables a medida que -todo es ying y yang- consolidaba su éxito y su popularidad como cantante. La crisis ya la dejó superada por anticipado, y así ha entrado en el estrepitoso 2021 en un momento personal de gran felicidad. Así lo declaró a la revista Semana el pasado verano en una entrevista: poco afortunada en el amor, en general, y tras una sequía de tres años sin pareja, la granadina volvió a recibir hace unos meses un nuevo flechazo de Cupido. Y, por lo que parece, ahora va en serio de verdad. "Es el hombre de mi vida", ha llegado a decir.¿De quién hablamos? Como suele ocurrir en la vida personal de Rosa López, hasta ahí llega la información conocida. Celosa de su vida privada, y muy cuidadosa a la hora de decidir qué cuenta y qué no, la ex triunfadora de la primera edición española de Operación Triunfo tiene blindadas varias parcelas de su intimidad, y una de ellas es la que corresponde a la identidad de su novio, del que no ha proporcionado datos concretos, como nombre, profesión ni aficiones, aunque sí que se conocieron en un concierto de Marta Sánchez en 2019. Hace poco, fueron pillados por la calle, de compras y parándose de vez en cuando para darse un beso, pero hasta ahí se sabe. Fue a El Hormiguero hace unas semanas, y corroboró todo lo que ya había dicho en las revistas: es feliz, y parece que ahora es la buena.PUBLICIDADDe modo que Rosa estrena los 40 en una inmejorable situación personal, después de haber superado varios de los problemas que se le habían presentado durante su desarrollo artístico. La historia es conocida: en aquella popularísima edición de Operación Triunfo de 2001, en la que competía con futuras bestias del escenario y el entretenimiento como David Bisbal, Chenoa y Juan Camus, Rosa se llevó al público de calle con un vozarrón natural que estremecía hasta el mármol.Se alzó con el premio, cantó en Eurovisión -quedó séptima-, y luego sufrió algo así como una variante benigna de la maldición de OT', que dice que, quien gana el concurso no es quien acumula el triunfo más sonado. El verdadero ganador de aquella edición fue Bisbal, de la misma manera que quien se llevó el gato al agua en la edición de 2005 fue Edurne (sexta), y no Sergio (nadie lo recuerda). Lo mismo ocurrió en la que ganó Amaia: quien se ha formado una carrera lucrativa de verdad es Aitana. Y aún no ha despegado la carrera de Famous.Rosa no estaba hecha para la exposición pública, las acrobacias y la predisposición a entrar en el mundo del famoseo como otros concursantes de su quinta. Aun así, tenía tirón y empezó a grabar discos, y le funcionaron. Ella venía de un ámbito familiar campesino, sobreprotector y poco abierto al mundo, y esa transición fue difícil; en cierto modo, es como si todavía no la hubiera completado, pues mantiene su inocencia y el miedo a salir de sus rutinas establecidas. Pero su público ha sido generoso y fiel en las últimas dos décadas, se lo ha puesto fácil, y así ha desarrollado una carrera estable en la canción melódica, vendiendo más de un millón de copias de sus ocho discos por ahora.En su camino hacia la consagración, Rosa ha tenido que vencer muchos miedos e inseguridades. Como ha dicho en varias ocasiones, se sentía acomplejada por cuestiones estéticas como su dicción -llegó a OT con su acento cerrado de Granada, y tuvo que acudir a un logopeda para vocalizar de una manera más estándar; ha dicho que no puede verse en vídeos de aquella época, que le produce una enorme vergüenza su manera de hablar-, y su físico.En ese aspecto, Rosa ha encontrado una buena oportunidad como prosélita reconvertida del fitness e imagen publicitaria para marcas que ofrecen productos dietéticos o de cosmética. En todo este tiempo, su cambio físico ha sido notable: hacia 2006 se propuso hacer ejercicio y bajó hasta 40 kilos de peso, hasta quedarse en su perfil actual, de figura más estilizada, alimentación, más saludable, carácter más comunicativo. Incluso cuando participó en su edición del programa ¡Mira quién baila!, acabó ganando.ipt async src="//www.instagram.com/embed.js">No siempre ha tenido esa sonrisa, porque construirse una carrera fue un esfuerzo duro que lo pagó con un sobreesfuerzo perjudicial. En 2002, justo cuando arrancaba, su actividad vocal le cobró peaje: perdió la voz y, según ha explicado, una negligencia médica de su equipo agravó la situación, y le fue difícil operarse a continuación para recuperar la habilidad de hablar y cantar. Estos detalles no se hicieron públicos en su momento, únicamente dejó entrever que padecía una afonía que se fue alargando unos meses. Rosa desveló los pormenores, entre lágrimas, en uno de los programas de Bertín Osborne emitidos en 2017.Esa fase ha sido, realmente, la más dura de su vida: no hay nada más terrible para una voz privilegiada que sentir, de repente, que el sonido no está. Tras un periodo de descanso, ejercicios, recuperación y examen de su carrera -algo que está a la orden del día, por ejemplo, en campos como la ópera-, Rosa recuperó su don. De hecho, el laringólogo que le operó, Pablo Cariñanos, fue luego su pareja. Luego Rosa perdió al novio, se acercó a un misterioso futbolista con el que también lo dejó, y finalmente ha encontrado a otro mejor. Ahora, ya ven, todo le va viento en popa.