Lo que la bancarrota se llevó:
JAPAN AIRLINES. El 19 de enero de 2010, la junta directiva de la más grande aerolínea de Asia declaró la quiebra. Tras la declarativa, el gobierno del país nipón ayudó con un plan de reestructuración a la empresa para que pudiera seguir operando.
Sin embargo, los problemas económicos le costaron el empleo a unas 15 mil personas, la tercera parte de la plantilla de la línea aíérea.
MEDIA NEWS GROUP INC. El 16 de enero, esta empresa, a la que pertenecen los diarios "The Denver Post" y "San Jose Mercury News", se declaró en bancarrota, aunque la gerencia de la empresa, sus diarios y empleados no fueron afectados por la reestructuración.
BLOCKBUSTER. El 23 de septiembre se declaró en bancarrota la mayor cadena de renta de videos en el planeta. Esto debido a una deuda de más de $900 millones que venía arrastrando, además de resultar afectada por la nueva tendencia de descarga de películas en Internet, que deja atrás la renta de las mismas.
Cientos de establecimientos han tenido que bajar las cortinas en los últimos tres años; la cadena aun trabaja diseñando un plan para salir de los números rojos.
METRO GOLDWYN MAYER. El 3 de noviembre, este estudio fílmico recurrió a la alternativa de declararse en bancarrota como un plan para decir adiós a una deuda demás de $4,000 millones. Su plan de reorganización ya está listo, de modo que la inyección de capital permita la producción de más películas y series.
A continuación, las empresas que estuvieron cerca, muy cerca de la bancarrota:
FANNIE MAE. En mayo, el gigante hipotecario solicitó al gobierno de Estados Unidos $8,400 millones para no entrar en quiebra, tras haber registrado una píérdida de $11,500 millones.
COMERCI. A mediados de 2010, la cadena de tiendas Comercial Mexicana solicitó entrar en concurso mercantil, “para instrumentar la reestructuración financiera acordada con la mayoría de las instituciones financieras y otros acreedores involucrados en el procesoâ€
MEXICANA. La aerolínea Mexicana de Aviación entró oficialmente en concurso mercantil en septiembre de 2010, y comenzó en ese momento la suspensión por tiempo indeterminado de todas sus operaciones. El rescate de la aerolínea, cuya deuda asciende a $500 millones, aún está siendo evaluado por las autoridades mexicanas.