El problema de desempleo que actualmente vive Estados Unidos no se espera mejore sustancialmente durante el 2011, consideró Bank of America-Merrill Lynch (BofaML).
A decir del director de Investigación Económica en Mercados Desarrollados de la institución, Ethan Harris, durante el próximo año esta tasa de desempleo seguirá afectando al consumo privado, por lo que se prevíé que los gastos de capital y corporativo sean mayores.
Refirió que dentro de sus proyecciones para el 2011, se estima que la economía estadounidense alcance un 2.8 por ciento, aumentando ligeramente su crecimiento al avanzar el año, mientras que la inflación subyacente se ubique en 1.0 por ciento en promedio durante el año.
El especialista tambiíén previó que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) global se reducirá de 4.9 por ciento a 4.2 por ciento, aunque el crecimiento de los mercados emergentes se mantendrá robusto al 6.4 por ciento, proveyendo tres cuartas partes del crecimiento PIB global del año.
Por su parte, el co-director de Economía y Estrategias en Renta Fija para Mercados Emergentes, Alberto Ades, consideró que en los mercados emergentes la demanda domíéstica reemplazará a las exportaciones como el principal impulsor del crecimiento.
Además de que los superávits de cuenta corriente externa declinarán en estas naciones emergentes, y que el ritmo de la apreciación de sus divisas continuará desacelerándose.