Por... BARRY HATTON
LISBOA -- Portugal logró recaudar el miíércoles 500 millones de euros en notas de la Tesorería, pero tuvo que pagar mucho más interíés para atraer a los inversionistas, preocupados por el abultado endeudamiento del país.
El interíés medio del 3,7% fue casi el doble del pagado por Portugal en septiembre, un indicio de que la crisis de la deuda soberana europea no ha desaparecido y que los inversionistas siguen exigiendo un interíés mayor acorde que el riesgo corrido con la compra de esos bonos.
"Es un elevado salto en el coste: de un 80%", dijo el analista David Buik, de la firma BGC Partners.
El aumento había sido anticipado, dado el precio que tuvo que pagar Portugal en el cuarto trimestre tras el rescate financiero de Irlanda, precedido por el de Grecia, por parte de la UE y el Fondo Monetario Internacional.
Pese al elevado interíés que tuvo que pagar Portugal, cundió una sensación de alivio, ya que la demanda superó los 1.300 millones de euros.
"La venta fue bien, considerando algunos de los pronósticos más pesimistas", escribió el gerente de deuda del Banco Carregosa, Filipe Silva, en un análisis.
Los problemas económicos portugueses podrían entenderse a España y otras naciones de la eurozona.
Los analistas sostienen que la falta de crecimiento real en la economía portuguesa y el crecimiento de la deuda quizá le obligue a solicitar un rescate, aunque el gobierno insiste que no lo necesita.
Portugal necesita recaudar este año 20.000 millones de euros en los mercados financieros.
El díéficit presupuestario llegó en 2009 al 9,6% pero es probable que este año caiga al 7,3%, aunque el objetivo gubernamental es una merma al 4,6%.
Empero, los analistas pronosticaron que las medidas de austeridad adoptadas por el gobierno perjudicará el crecimiento económico. La Comisión Europea cree que la economía se contraera este año un 1%.
El rendimiento del bono portuguíés a 10 años subió el miíércoles levemente al 6,4%. En comparación, el bono alemán del mismo plazo bajó levemente al 2,9%.