La escasez de billetes y monedas en algunos puntos del país dificultaba el viernes el cobro de sueldos a travíés de los cajeros automáticos y obligaba a una línea de ferrocarril de Buenos Aires a permitir a los pasajeros viajar gratis por la imposibilidad de facilitarles cambio.
Docentes estatales de la provincia de Buenos Aires denunciaron que aunque tienen acreditado su sueldo en sus cuentas bancarias desde el 4 de enero, hasta ahora no han podido retirarlo ya que los cajeros no suministran dinero; un problema que se repite en la provincia de Santa Fe.
Las cadenas de televisión difundieron imágenes de decenas de personas haciendo fila en las puertas de los bancos públicos para intentar obtener efectivo y de clientes protestando en la calle frente a las entidades financieras.
Los trabajadores de la línea de ferrocarril Sarmiento, que opera en el oeste de Buenos Aires y sus alrededores, cerraron las boleterías hasta que la empresa Trenes de Buenos Aires restituya los descuentos salariales que les aplicó por haber redondeado en favor de los pasajeros el precio de los pasajes debido a la falta de monedas de 10 y 5 centavos. Las expendedoras automáticas de pasajes tampoco funcionan.
Economistas explicaron que, además de los problemas tíécnicos de impresión de billetes que se produjeron en Argentina, la escasez es consecuencia de una mayor demanda de dinero por efecto de la inflación y reclamaron al gobierno la emisión de billetes de mayor denominación a la de 100 pesos (25 dólares).
El economista Carlos Melconian dijo al canal de cable Todo Noticias que "desde diciembre del 2001 a diciembre del 2010 la inflación fue de 300%... se necesitan cuatro veces más billetes que antes" para comprar lo mismo, "salvo que hagan un billete de 400 pesos".
El Banco Central informó a medios de prensa que dispuso un "operativo especial" de distribución de billetes hasta el martes próximo, cuando llegarían los billetes que encargó imprimir en Brasil a fines de diciembre debido a los problemas tíécnicos que sufrió una de las máquinas de la Casa de la Moneda.
