El índice de referencia de la bolsa española abre cayendo por cuarto día consecutivo, y se deja alrededor de un 1%, perdiendo los 9.500 puntos tras perder un 3% la semana pasada. El temor a la crisis de deuda en la Eurozona acapara la atención de unos mercados que verán esta semana emitir a Portugal, España, Grecia e Italia. La prima de riesgo de España vuelve a subir y roza los 270 puntos.
Por el contrario, Wall Street ha comenzado el año con el mismo optimismo con el que terminó 2010, a pesar de algunos datos económicos decepcionantes (como el paro de diciembre conocido el viernes).
Sin embargo, este optimismo tambiíén allí puede truncarse en breve por el reagravamiento de la crisis de la deuda en Europa y los rumores del inminente rescate de Portugal.
Por si estos temores no fueran suficientes, esta semana dará comienzo la temporada de resultados del cuarto trimestre, que debe confirmar la fortaleza de la recuperación económica. Se espera que los beneficios del S&P 500 hayan subido un 32%, pero con una mejora de los ingresos de sólo el 6%. Si las primeras firmas en rendir cuentas no están a la altura, podemos ver una corrección de cierta importancia.
Además, conoceremos algunos datos económicos relevantes; si tampoco cumplen las expectativas, la corrección será inevitable.
Hoy lunes abrirá el fuego Alcoa, como es tradicional, tras el cierre de Wall Street.