El Gobierno de Angela Merkel va a proponer en la cumbre hispano alemana que se celebrará el 3 de febrero en Madrid programas bilaterales que incentiven a los jóvenes españoles la búsqueda de empleo en Alemania. En realidad, la oferta partió ya del ministro de Hacienda, Wolfgang Schí¤uble, como adelantó EXPANSIí“N 4 de diciembre. Schí¤uble considera que iniciativas de este tipo pueden ser “respuestas pragmáticas a la crisisâ€, ya que, con menos del 7% de paro en Alemania, existe una fuerte oferta en determinados segmentos del mercado laboral, mientras en España el desempleo supera el 20% y dobla ese porcentaje entre los jóvenes. Fuentes diplomáticas señalaron a EXPANSIí“N que el Misterio de Trabajo español no recibió la iniciativa con mucho entusiasmo ante el temor de que “pueda parecer que España necesita una segunda ola de emigraciónâ€. Pero la idea alemana no trata de revitalizar la inmigración de los años sesenta con los desafortunadamente llamados Gastarbeiter (trabajadores invitados), ya que ambos países gozan del derecho de libre circulación de trabajadores de la UE. La idea de Merkel es matar dos pájaros de un tiro. Alemania en pleno boom económico –su PIB creció el 3,6% y este ejercicio lo hará a un ritmo de más del 2%, según las previsiones– necesita más de 800.000 trabajadores para cubrir sobre todos puestos en la industria del país. Intercambio Es probable que Alemania ofrezca al Gobierno español incentivar los programas de intercambio –que ya existen y están financiados por la Unión Europea– pero tambiíén facilidades para la formación de jóvenes españoles a travíés del sistema dual alemán de formación profesional, que combina taller y escuela, y que es uno de los más prestigiosos del mundo. Según el Instituto de Mercado de Trabajo de Ní¼renberg, tres de cada cuatro vacantes son para ocupar de manera inmediata. Las opciones laborales se han duplicado en algunos campos como el de procesamiento de madera, en la industria del papel, las imprentas, editoriales y la industria del metal.