Indra cerró el ejercicio 2010 con un beneficio neto de 189 millones de euros, lo que representa una caída del 3,3% con respecto al ejercicio anterior, debido a los costes extraordinarios registrados que han requerido las actuaciones de adecuación de su estructura productiva, según los datos del cierre preliminar del ejercicio remitidos por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Sin considerar dichos gastos extraordinarios de 33 millones de euros más en el conjunto del ejercicio, el beneficio neto del grupo tecnológico en 2010 habría crecido más de un 10%.
Así, la empresa presidida por Javier Monzón señaló que "ha cumplido todos los objetivos anunciados" a principios del año pasado para 2010, "a pesar de que el deterioro de las condiciones de mercado, en particular en el mercado español, ha sido mayor del previsto".
Las ventas ascenderán a 2.557 millones de euros, aumentando un 2% y situándose dentro del rango objetivo anunciado. Las ventas internacionales alcanzarán un 40% del total, creciendo al 10%, mientras que en el mercado nacional se han reducido un 3%.
Por su parte, la contratación en el pasado ejercicio se situará en 2.880 millones de euros, creciendo un 7% y superando el objetivo inicial del 5%. En este apartado, la contratación internacional alcanzará el 44% del total, aumentando un 23%, mientras que la domíéstica ha descendido un 3%.
El margen EBIT recurrente (antes de gastos extraordinarios) se situará en un 11,2%, cumpliendo el objetivo de mantenerse en el entorno del nivel alcanzado en el ejercicio precedente (11,4%).
OBJETIVOS PARA 2011
Además, Indra indicó que para 2011, con un entorno para sus negocios de dificultades y complejidad similares a los de 2010, se marca unos objetivos de un crecimiento de las ventas superior al 2%, con los mercados internacionales creciendo a tasas relevantes y el mercado nacional con un comportamiento ligeramente negativo.
En lo que respecta a la contratación para el presente ejercicio, prevíé que sea algo superior a la del año anterior y "apreciablemente" mayor que las ventas establecidas para el año, así como un margen EBIT de al menos el 10,5%.
La compañía tambiíén mantendrá su política de retribución a los accionistas, siendo el dividendo de 2011, "al menos", igual al del ejercicio anterior.