Los colosos del petróleo no pueden con Repsol y Cepsa, y huyen de España
por Miguel íngel Patiño en Expansión
Cepsa, la segunda mayor petrolera en España, tras Repsol, ha llegado a un acuerdo para la compra de la totalidad de la filial en España del gigante petroquímico Chevron. Esta compañía es la segunda mayor petrolera estadounidense, con una capitalización de 143.000 millones de euros, sólo superada por los 308.000 millones de euros que vale la tambiíén norteamericana Exxon, el mayor grupo petrolífero mundial. Chevron tiene en Canarias una red de 62 estaciones de servicio bajo la marca Texaco.
La operación con Cepsa tambiíén contempla la adquisición por parte de esta compañía, controlada por el grupo francíés Total, de los negocios de almacenamiento y distribución de combustible en Canarias de Chevron, así como los negocios de aviación y lubricantes terrestres en la Península.
Chevron deja así el mercado español. La compra, cuyo precio está aún por definir totalmente, es el eníésimo movimiento de este tipo que se produce en España en los últimos años. Los mayores gigantes internacionales del sector han ido traspasando sus negocios en España, huyendo de este mercado, ante la fortaleza de los grupos locales.
í‰xodo
El íéxodo empezó en 2004, cuando la angloholandesa Shell, cuarta petrolera mundial, con un valor de 160.000 millones de euros en bolsa, vendió 338 gasolineras a la empresa española Disa, de la familia Carceller, en una operación valorada en 400 millones de euros. Paradójicamente, el goteo de operaciones se intensificó a partir de 2008, cuando los precios de las gasolinas y los gasóleos empezaron a batir cifras ríécord y, supuestamente, los márgenes en distribución, siempre muy ajustados, aumentaron. En 2008, la italiana Saras se hizo con 81 gasolineras de ERG, tambiíén italiana.
La portuguesa Galp inició un ambicioso plan de expansión en España quedándose con las gasolineras de otras petroleras mucho mayores. A Exxon, le compró las 130 gasolineras que tenía con la marca Esson, y al grupo italiano ENI, que está entre las diez mayores petroleras del mundo, con un valor de 72.000 millones de euros, le compró 280 estaciones de servicio con la marca Agip. En total, Galp pagó por las gasolineras de los dos grupos casi 700 millones de euros. Cada coloso ha ido dejando el territorio español de una forma.
En lugar de operaciones en bloque, el grupo británico BP (síéptimo del ránking mundial, con 106.000 millones de euros de valor en bolsa), fue traspasando discretamente su red de gasolineras a sus propios empleados, o antiguos franquiciados a lo largo de 2010. Desde que se inició la salida de las petroleras internacionales en España, han cambiado de manos más de mil gasolineras (un 11% de las que existen) en operaciones que suman más de 1.200 millones de euros. Repsol y Cepsa copan la red, con 3.600 y 1.500 puntos (el 39% y el 16% del mercado).
Cambia el mapa
- El baile de compraventas empezó hace más de un lustro, con la venta de la red de Shell a Disa, que se convirtió así en el quinto distribuidor en España.
- En España existen 9.200 gasolineras. Repsol tiene el 39% del mercado y Cepsa controla el 16%.
- Galp protagonizó la mayor transacción, al anunciar la compra simultáneamente de la red de Exxon y ENI. Se incluían activos de venta al por mayor y de lubricantes.
- BP, cuya marca está en casi 700 estaciones, ha traspasado la gestión de las que tenía en propiedad a diversos empresarios. Galp está a punto de superarle como tercer distribuidor