La amenaza de la inflación se ha vuelto a instalar en el mercado, que ya está descontando una subida de tipos en Europa a corto plazo y la escalada del precio del petróleo no hace sino aumentar las presiones. El BCE ya lo ha avisado, subirá los tipos si es necesario, pero los expertos alertan sobre la debilidad de la recuperación económica y del riesgo de que se produzca una situación de estanflación.
El precio del crudo está entrando “en una zona peligrosa†que amenaza al crecimiento económico global, advierte Faith Birol, economista jefe de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, siglas en inglíés). Además, considera que “podríamos ver precios aún más altos si continúan las protestas en países clave de Oriente Medio y del Norte de ífrica. La situación de esta región es muy importante “no solo para las próximas semanas, sino desde una perspectiva de largo plazoâ€.
El barril de crudo Brent, de referencia en Europa, se ha disparado esta semana hasta máximos de abril de 2008 al superar los 108 dólares y acumula una ganancia del 13% en lo que va de año, tras haber repuntado un 21% en 2010. Las tensiones en Oriente Medio, que han pasado de Túnez y Egipto a Libia o Banríéin, han generado tensiones en los mercados mundiales que han servido de apoyo para la tendencia alcista que ya mantenía el petróleo y que han llevado a los inversores a decantarse, en los mercados de divisas, por el dólar y el yen frente al euro.
UBS ha calculado que cada subida de 10 dólares en el precio del crudo genera 0,2 puntos de inflación durante el primer año y 0,1 puntos durante el segundo. Y señala que el encarecimiento del petróleo puede generar, en un primer momento, inflación ya que incide directamente sobre la factura energíética, pero que puede tener, a largo plazo, un efecto deflacionista sobre los indicadores subyacentes de precios, que excluyen energía y alimentos, debido a que la subida del crudo afecta de forma negativa sobre los salarios, el consumo y el empleo.
“Europa es la zona económica más vulnerable y una escalada de los precios del petróleo acentuaría el riesgo de estanflaciónâ€, explica Eric Le Coz, del Comitíé de Inversión de Carmignac Gestión. Según Le Coz, aunque la economía alemana, con “una salud casi insolenteâ€, justifica por si sola una subida de tipos, “Trichet deberá contentarse con lanzar un mensaje de vigilancia, pues una vuelta de tuerca monetaria podría precipitar una nueva crisis europeaâ€.
Además, Le Coz advierte sobre “la fragilidad de la zona euroâ€, por lo que “una posible espirar alcista en los precios del petróleo pondría inevitablemente en peligro la díébil recuperación económica actualâ€.
El BCE ya ha lanzado la advertencia sobre los tipos: el economista jefe de la entidad, Jí¼rgen Stark, ha dicho que actuarán con rapidez y de forma decisiva para luchar contra los riesgos de la inflación.
Es la última intervención de un miembro del BCE –Trichet ya hizo alusión al tema hace unos días- que apunta a que la autoridad monetaria europea subirá los tipos en los próximos meses, lo que podría dificultar el acceso de las entidades financieras medianas al críédito y ralentizar el crecimiento de las economías más díébiles de la eurozona. En la actualidad la tasa de referencia en la eurozona se sitúa en el 1% y la inflación anualizada en enero se situó en el 2,4% -dato más alto desde octubre de 2008-.
Algunos expertos señalan abril como el momento en que se podría comunicar una subida de tipos, otros indican que será en septiembre. Por su parte, S&P ha dicho que la primera subida de tipos será en verano. Sin embargo, el equipo de renta fija de M&G cree que aunque hay que proteger las carteras contra la inflación a corto plazo, a medio plazo los precios se moderarán, por lo que los tipos podrían no subir. En cualquier caso, suenan los tambores de la subida de tipos para contener la inflación, por lo que conviene que los inversores adapten su cartera de inversión.