Ignacio Sánchez Galán ha vuelto a despistar a los inversores. Ayer anunció una inyección de fondos por el 5,8% de Iberdrola que suscribirá un fondo de Qatar apenas cuatro días despuíés de revelar por sorpresa que absorberá su filial de renovables. La operación, que eleva a 6.750 millones las ampliaciones de capital de los tres últimos años, se contradice con lo que elíéctrica dijo el 20 de enero cuando acordó la compra de la brasileña Elektro.
Los 1.900 millones de euros que va a aportar Qatar Holding, socio de Banco Santander en Brasil, se suman a la ampliación de capital por 1.325 millones que el grupo hizo en junio de 2009 (9,9 euros). En aquella ocasión, la transacción, por el 5% del accionariado, se realizó para reforzar los recursos propios y evitar una rebaja del rating. Un asunto clave para Iberdrola, que emite deuda por unos 8.000 millones de euros al año.
Esa inyección se hizo a 5,30 euros por título, un 46% por debajo del precio de la ampliación de capital de 3.374 millones de junio de 2007, un dinero que sirvió para comprar la estadounidense Energy East. En ambos casos, como el de ahora, se produjo una importante dilución para todos los accionistas, incluido ACS. Con la llegada del socio árabe, el holding presidido por Florentino Píérez verá reducida su posición desde el 20,2 hasta el 19%, lo cual dificultará un poco más su objetivo de consolidar su participación por puesta en equivalencia. La constructora ha invertido algo más de 7.000 millones de euros en alcanzar ese paquete, casi lo mismo que Iberdrola ha ensanchado su accionariado. En total, ambos se han gastado cerca de 14.000 millones de euros.
La entrada de Qatar, que tambiíén compró un 9% de Hochtief para blindar sin íéxito a la alemana de la OPA hostil de ACS, sorprendió ayer a los inversores porque se contradice con lo que Iberdrola explicó el pasado 20 de enero cuando anunció la compra de Elektro por 2.400 millones de dólares. En ese momento dijo que la compañía recurrirá a desinversiones o a deuda en su participada Neoenergia, así como a los 600 millones obtenidos por la colocación del díéficit de tarifa para financiar la adquisición. Ayer señaló que el dinero de Qatar se utilizará para evitar un aumento del endeudamiento como consecuencia de la nueva inversión en Brasil y la OPA sobre Renovables.
"El acuerdo no provocará un deterioro de los parámetros crediticios y, por tanto, pensamos que no generará ninguna necesidad de ampliaciones de capital", afirmaron los analistas de Barclays a finales de enero. En Iberdrola sostienen que no se ha cambiado de opinión y que ni mucho menos se ha engañado al mercado. Argumentan que tras la compra de Elektro ha surgido la oportunidad de dar entrada a Qatar para mejorar la estructura financiera de la sociedad.
Bloqueo a ACS
Sea como fuera, con esta ampliación Iberdrola mata dos pájaros de un tiro. Por una parte, evita un recorte de sus ratings de solvencia, lo cual encarecería de forma sustancial sus costes de financiación. La empresa dirigida por Ignacio Sánchez Galán es la única española del sector que ha evitado un ajuste a la baja de sus calificaciones crediticias por parte de Moody´s, que, no obstante, la tiene en perspectiva negativa. Los bonus de sus directivos están ligados a este objetivo.
Por otra parte, refuerza el núcleo duro de Iberdrola, que se había visto superado por el incremento de la participación de ACS en 2010 desde el 11,7% hasta el 20,2%. Ahora, la sociedad de cartera de los March y de los Albertos se quedará en el 19,2%, mientras que los accionistas próximos al proyecto que abandera Galán tienen cerca del 22,75%. Entre ellos están BBK, con el 7,1%- tras la ampliación se quedará en el 6,7%-, Bancaja, con cerca del 5,7% (5,35% post operación) y un grupo de cajas más pequeñas e inversores privados que tienen el 5,24% (4,9%). Desde ACS se ha filtrado en los últimos meses que la valenciana podría vender su paquete porr las necesidades de capital de Bankia.
El pulso es importante si se tiene en cuenta que a partir del próximo 1 de julio desaparecerán la limitación de los derechos de voto por la entrada en vigor de la conocida como enmienda Florentino. El límite del 10% por el que se rige la junta de accionistas de Iberdrola pasará a la historia y cada título será un voto. Por tanto, ACS podría convocar una junta extraordinaria a la vuelta del verano para derrocar a Galán. Con ese fin, a finales de enero, en la presentación de sus resultados de 2010, Píérez anunció que quería alcanzar el 30% de la elíéctrica a corto plazo, declaración que la CNMV no consideró objeto de un hecho relevante como si hizo cuando hizo público su reto de llegar al 20%.
