Ahorro Corporación, BBVA, Gala Capital y Capital Riesgo Madrid cortan el grifo a sus participadas del sector y optan por el concurso de acreedores.
El Juzgado de lo Mercantil número 11 de Madrid ha declarado en concurso voluntario de acreedores a la cadena de tiendas de regalo, decoración y moda Musgo, con una plantilla de 270 trabajadores, 30 tiendas y un pasivo de 15 millones de euros, según una resolución publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Ahorro Corporación, que controla el 87,5% de la firma a travíés de AC Desarrollo, decidió solicitar a principios de enero el concurso voluntario ante la imposibilidad de renegociar la deuda y fracasar los intentos de encontrar un inversor.
Fuentes conocedoras de su situación admiten que la viabilidad del proyecto es complicada. De esta forma, Musgo se enfrenta al riesgo de liquidación, una solución por la que ha optado Coronel Tapiocca, participada por el fondo Gala Capital. Esta firma ha pedido la liquidación anticipada ante la imposibilidad de encontrar fórmulas para pagar una deuda que supera los 87 millones.
Más ejemplos
Musgo y Coronel Tapiocca reflejan una de las situaciones más complicadas del sector, pero no son casos aislados. BBVA aspira a mantener la actividad de Hazel, la cadena de moda y complementos en la que participa a travíés del fondo Valanza, que solicitó el concurso voluntario abreviado.
La firma ha reducido la estructura y cuenta con menos de una decena de tiendas en la actualidad. Además, en diciembre de 2010, se declaró el concurso de acreedores de Grupo Nupcial Novissima, participado por la Comunidad de Madrid –a travíés de Capital Riesgo Madrid– y su fundador, Moisíés Anselen. Por su parte, Ibersuizas instó a mediados de febrero el concurso para Festa Moda, en la que controla un 75% del capital.
Mientras, la empresa andaluza Artesanos Camiseros, especializada en la confección de camisería a medida, se ha acogido al procedimiento de negociación de deuda de la Ley Concursal (artículo 5.3), que concede un plazo de hasta cuatro meses para presentar un plan de pagos y alcanzar un acuerdo con los acreedores antes de declararse insolvente. Sus accionistas deben votar la próxima semana si amplían capital por un millón de euros para reforzar el balance de la empresa.
Esta situación se produce tras el desembarco masivo de las firmas de capital riesgo en el retail, uno de los sectores más atractivos para los inversores, pues permite rápidos crecimientos. “í‰ste es un sector que ha dado muchas alegríasâ€, recuerda Mikel Bilbao, socio de private equity de GBS Finanzas, que alude al íéxito de Gala Capital en la firma de lujo Jimmy Choo.
Cambio de ritmo
El desarrollo de la economía española impulsó el crecimiento del ‘retail’ y animó el desembarco de inversores en el sector.
Sin embargo, la caída del consumo ha puesto a prueba la resistencia de los modelos y la necesidad de una buena gestión, un producto atractivo y un alto control de costes.
Los conceptos que están ganando la partida se encuentran en dos polos opuestos. Por un lado, el lujo ha batido ríécords en 2010 y, por otro, triunfan las propuestras asequibles. Los conceptos intermedios son los que más sufren.
