El mercado comienza a descontar nuevas subidas este año y algunos analistas creen que puede marcar el inicio de una tendencia.
La posibilidad de una subida de tipos de interíés en la eurozona por parte del Banco Central Europeo (BCE) anunciada tras el último Consejo de Gobierno por su presidente, Jean Claude Trichet, puede convertirse en una realidad en la reunión de este jueves, o como muy tarde en la del mes de mayo, según los analistas consultados por Europa Press, que resaltan además que el mercado ya está descontando que no será la última que se lleve a cabo antes de que acabe 2011.
El analista de IG Markets, Daniel Pingarrón, señala que existe una probabilidad de entre el 60% y el 70% de que el BCE suba los tipos en un cuarto de punto, y cree que en caso de que finalmente no los modifique, "endurecería muchísimo su discurso" y daría por seguro que la subida se produciría en su siguiente reunión.
En su opinión, un posible retraso de esta decisión al mes de mayo puede venir provocado por la situación que atraviesa Portugal, así como por ver cómo acaba el conflicto en Libia y cómo evoluciona el precio del petróleo, "que es en definitiva el causante de esta subida prematura de tipos".
Otra factor que puede hacer que se mantengan, según Pingarrón, es que todas las declaraciones realizadas hasta ahora por Trichet fueran simplemente disuasorias, "más amenazantes que reales", poniendo íénfasis en la preocupación sobre los tipos de interíés para forzar a los Gobiernos a tomar medidas al respecto.
Alberto Castillo, analista de Capital Bolsa, tampoco descarta esta subida ya que Trichet tiene su mensaje "muy estudiado" y otros miembros del BCE ya han preparado con sus declaraciones al mercado para esta subida que ya está "totalmente" descontada. En su opinión, la sorpresa sería que finalmente no se produjera.
Por su parte, el analista de Atlas Capital, Ignacio Cantos, reconoce que los acontecimientos de las últimas semanas puedan retrasar "un mes más" una subida "bastante decidida", aunque asegura en que probablemente sería "retrasar lo inevitable", dado que el barril de Brent sigue en torno a los 116 dólares.
Subida puntual o inicio de tendencia
Las dudas surgen ahora sobre si esta previsible subida será algo puntual o, en cambio, marque un cambio de tendencia en la política monetaria de 2010. Desde Atlas Capital, consideran que más que una subida es una "normalización de los niveles" de los tipos, ya que hay economías en Europa que están creciendo a un ritmo sostenido.
Sin embargo, Pingarrón considera que esta subida marcará el "inicio de una tendencia" y ve "prácticamente seguro" que el año termine con los tipos de interíés por encima del 1,5%, dado que espera una nueva subida a la vuelta del verano en el último trimestre del año. "No creo que los suba un cuarto de punto para volverlos a subir un cuarto de punto en 2012", apostilla.
En esta línea, Castillo señala que, aunque Trichet dijo que no debía tomarse como el principio de una serie de subidas, los datos inflacionistas reflejan "presiones reales" que sugieren la idea de una "senda continuada" de la que aún queda por saber el ritmo y cuantos movimientos se van a producir.
Por ello, el analista de Capital Bolsa considera que no va a ser una subida puntual y que le seguirá por lo menos otra en este año. Además, añade que el mercado está descontando incluso que se produzca una tercera subida antes de que acabe 2011.
Desde Renta 4, Nuria ílvarez cree que habrá que seguir analizando la evolución de los precios energíéticos para comprobar si se trata de una subida puntual o el inicio de un proceso de subidas más escalonadas. En su opinión, será algo "puntual", porque Trichet no se encuentra "cómodo en niveles tan bajos de tipos de interíés", pese a que el mercado empieza a descontar que va a haber más subidas.
En este sentido, defiende que hablar de otra subida de tipos es "bastante aventurado", dado que la inflación subyacente está bastante contenida y se espera que la inflación en 2012 sea la mitad que la actual, lo que indica que no existe un problema estructural y obedece a la subida de los precios energíético.
Consecuencias para España
Respecto a las consecuencias que tendrá para España, desde IG Markets creen que serán "muy malas". Así, explica que, aunque es una subida "razonable" para Alemania, donde no es apropiado mantener los tipos cuando la economía crece al 3%, el consumo se ha reactivado y el desempleo está en mínimos históricos, en España el consumo sigue siendo "anoríéxico" y la creciente inflación se debe casi al 100% a los precios del petróleo.
Sin embargo, reconoce que el euribor ya ha descontado esta subida de 0,25 puntos porcentuales, porque lo que espera que su reacción sea "bastante comedida". En cambio, alertó de que si el año acaba con un euribor cercano al 3% el daño puede ser enorme y puede volver a lastrar el "tímido" crecimiento del país.
En esta línea, Castillo apunta que las consecuencias serán "negativas" en todos los aspectos. Así, reconoce que en algunos momentos son necesarias para enfriar una inflación derivada de un repunte económico, pero recuerda que en el caso de España ese repunte no se está produciendo y se está "importando la inflación de países emergentes".
Por su parte, la analista de Renta 4, Nuria ílvarez, señala que tampoco va a ser una "subida enorme cómo para que pueda tener un impacto relevante" en cuanto a desaceleración del ritmo de crecimiento económico, pero sentará "mejor o peor" a las diferentes economías de la zona euro.
Así, señala que en el caso de España es "más perniciosa" y ya está teniendo implicaciones negativas. De hecho, señala que ha puesto las cosas "más complicadas", dado que el euribor ya ha descontado esta subida y ronda el 2%.
Por último, Cantos señala que el euribor es probable que se mantengan en los niveles cercanos al 2% que ha registado en los últimos días, pese a la subida de los tipos, ya que un euribor por encima en 0,30 o 0,40 puntos porcentuales por encima de su tipo oficial es algo "razonable" y no debería ir "mucho más allá".
En cambio, señala que las facilidades que pueda tener la gente para obtener financiación será porque los bancos o España mejoren su situación y no porque el BCE tenga los tipos de interíés "más altos o más bajos".