El Gobierno liberalizará el comercio en zonas turísticas antes del verano
por Josíé María Triper en el Economista
El presidente del Gobierno ha asumido que, si quiere tener el apoyo de los grandes empresarios a sus medidas y recortes anticrisis, debe aceptar algunas concesiones y cumplir sus compromisos.
Así, en noviembre les entregó en bandeja la cabeza de las Cámaras de Comercio accediendo a las demandas empresariales de supresión del pago obligatorio de la cuota cameral. En marzo vendió una reforma del sistema financiero a la medida de la gran banca.
Y, ahora, en junio tiene previsto regalarles la homogeneización y flexibilización del comercio en las zonas turísticas, con objeto de permitir la libertad plena de horarios comerciales en todas las zonas en las que la media ponderada de la población sea superior al número de residentes.
Tíécnicos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo trabajan ya en una propuesta, que el Gobierno quiere negociar y consensuar con las comunidades autónomas, las corporaciones locales y el sector, en la que la definición de Zona de Especial Interíés Turístico comprenderá "al menos, el centro de las grandes ciudades, donde se focaliza la principal concentración turística y comercial".
De esta forma se eliminaría la petición expresa del Ayuntamiento a la que obliga hoy la normativa para obtener la declaración de zona turística en la totalidad de un municipio o en parte, y se daría satisfacción a las demandas de la gran distribución para poder abrir sus establecimientos durante todos los festivos del año en determinadas grandes ciudades para fomentar el turismo de compras.
Mandato de la UEM
Al margen de las demandas empresariales, el camino hacia la libertad de horarios se marcaba ya en el discurso del presidente del Gobierno durante la presentación del Informe Económico de 2010, cuando afirmaba que entre las medidas para el relanzamiento de la economía "plantearemos a las comunidades autónomas actuaciones concertadas en materia de horarios comerciales, de actividades sometidas a licencias municipales y de la incorporación de nuevos instrumentos de coordinación entre las comunidades autónomas y la Administración Central".
Una iniciativa que recibía el espaldarazo de los Jefes de Estado y de Gobierno de la zona euro, que en su reunión del pasado 11 de marzo incluían entre las medidas de aumento de la productividad "una mayor apertura de los sectores protegidos con medidas a escala nacional para suprimir las restricciones injustificadas a los servicios profesionales y en el sector de la venta minorista, para fomentar la competitividad y la eficiencia".
El propósito del Gobierno es tener lista la nueva normativa para antes del verano, definiendo un marco mínimo común para delimitar las zonas turísticas, siempre negociado y con el acuerdo de las comunidades autónomas.
72 horas semanales
La normativa actual fija el horario global del comercio en días laborables en un mínimo de 72 horas semanales, que las comunidades autónomas podrán incrementar pero nunca reducir.
En la actualidad todas las comunidades autónomas tienen 72 horas semanales con las excepciones de Madrid, que permite la libertad total de horarios, además de , que tienen 90 horas semanaleCastilla y León, La Rioja y Canariass. Un escenario muy similar al que se da para las aperturas en domingos y festivos, en el que la normativa básica del Estado fija un mínimo de 12 aperturas anuales, aunque las comunidades autónomas pueden modificar este número para reducirlo, aunque nunca por debajo de ocho, o para incrementarlo.
En el caso de que se opte por la reducción las comunidades autónomas están obligados a "justificarlo motivadamente", mientras que el incremento podrá hacerse sin tope alguno, pudiendo llegar hasta los 53 domingos del año.
La situación actual ofrece un mapa en el que todas las comunidades fijan ocho domingos de apertura, salvo Madrid con 22, Ceuta con 12, Murcia con 10 y Canarias con 9. Estas limitaciones sólo afectan a los hipermercados y los supermercados, ya que los pequeños comercios tienen libertad para abrir sin restricciones.